Otra vez España
avisa a Catalunya de que la independencia supondría "una pérdida del PIB
catalán entre un 20 y un 25%", cuanto nos quiere que nos avisa que nos la
vamos a pegar, yo lo siento pero no puedo creerlo, España no nos avisa amorosamente,
lo que hace es acosarnos amenazarnos y asustarnos, para intentar que dejemos de
pensar que segregados estaríamos mejor, pero ya lo dije una vez y lo repito hoy
“España no me quieras tanto” ya nuestro amor se termino, ya no nos queremos el uno
al otro, la unión se rompió, la diferencia entre nosotros ahora es que los
catalanes queremos emprender otra vida, y tú no quieres que la vivamos ni que
lo intentemos.
La cuestión es
porque actúas de esta manera y encima casi orgullosamente, porque haciéndolo así
es cuando pierdes la razón, que te importa que perdamos un 25% de nuestro PIB si
es nuestra voluntad, a ti que más te da,
o es que mientes otra vez más como casi siempre lo has hecho con nosotros, no será
que eres tú la que perderías un 25% del PIB, si todo lo que representa de
fortaleza económica, industrial, comercial y de imagen, que te aporta la “marca
Catalunya” se separa de ti; a ver si lo entiendes de una vez, tú problema no es
que Catalunya se estrelle si se va, sino que tú te estrellas si nos vamos, porque
si no, es de tontos que mientas, que acorrales, que traiciones, que amenaces,
que acoses, y que chantajees, a una nación que no pide nada más que ser eso,
una nación independiente.
La realidad
incuestionable es que tienes miedo a perder una parte de ti, que consideras tuya
por derecho histórico y por que representa mucho, muchísimo, para mantener tú economía
y tú equilibrio nacional, esto si lo puedo entender, pero esto no justifica el
actuar con la mala fe y las malas artes con que lo intentas evitar. Creo que lo
noble, lo grande, lo señor, seria que admitieses que en Catalunya sus
habitantes catalanes o no, manifestasen libremente su opinión en un referéndum oficial,
porque ten por seguro que uno de los dos se llevaría una sorpresa, y no tengo
nada claro en este momento quien sería el sorprendido, si España o Catalunya, pero
lo que es evidente es que si no aceptas el juego limpio y democrático, siempre
quedara la duda.
Una duda que
aunque no quieras entenderlo fortalece cada vez más la razón de la nación catalana,
porque la realidad es que tus amenazas
son bastas, ruines, y poco nobles, y ante ellas Catalunya solo opone paciencia,
penas, y sufrimiento, porque estás haciendo mucho daño a la sociedad civil que
habita en Catalunya, ya sea catalana o
no, no es la forma más democrática y civilizada, la de “matar al perro para
terminar con la rabia” que es la postura que has planteado para enfrentarte al
problema, y ningún argumento que eximen tus servidores, se apoya ni en datos
documentados, ni en razones democráticas modernas, una y otra vez esgrimes la
historia, la unidad, la constitución y al estado, de la historia no nos vamos a
ir siempre estaremos unidos a la historia de una España que ha llegado hasta aquí,
la unidad repito ya se ha roto, la constitución ya no nos ampara, y el estado
del que dices formamos parte nos acosa, nos maltrata, y encima nos acusa de desleales,
así no se puede reconsiderar la situación
de entendimiento por nuestra parte.
Pero es inútil, el ministro de
Asuntos Exteriores, ha rechazado este jueves la comparación entre Escocia y
Cataluña al recordar que, mientras que el Reino Unido "no tiene una
Constitución escrita", el artículo primero de la española establece que la
soberanía reside en el pueblo español, "en su conjunto, no en una
parte". Por lo tanto queda claro que para ustedes no se puede ser catalán porque
lo dice un escrito. En este contexto de la ley tienen razón, pero no lo tienen
en el sentimiento humano y no lo tendrán hasta que sepamos ustedes y nosotros,
cual es realmente este sentimiento de verdad, y repito, lo suyo es miedo a saberlo
por lo que pueden perder, y lo nuestro es ilusión por conocerlo por lo que
podemos ganar, he aquí la diferencia entre ambos.
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