Todos con Japón

Tres días de espanto y confusión.

Japón: Dios mío ¿qué han hecho para castigarlos así? , o no, quizás no es un castigo para este país, quizás es un aviso para toda la humanidad. ¿Que nos quieres enseñar señor? Lo insignificantes que somos ante tu poder, lo ridículos que somos creyéndonos los más grandes, poderosos e inteligentes de tu creación.

Dios mío perdónanos ya es suficiente ya henos visto un poco del fin del mundo, mas no por favor, quiero prometerte que lo hemos aprendido, que hemos visto tu poder y que de ahora en adelante miraremos las cosas de otra manera. Cuidaremos tu planeta Tierra, nos preocuparemos de nuestro prójimo como de nosotros mismos, no jugaremos más a guerras interminables por poder o riquezas, que tú eres capaz de destruir en una hora, miraremos de equilibrar las diferencias entre nuestras razas, no especularemos con el hambre de los demás, no sé que prometerte más, porque no sé quién soy yo para prometerte nada.

Ahora toca al mundo reflexionar y ayudar porque el mundo después de esto necesitara ayuda TODO EL MUNDO, esta vez la visión acaecida del apocalipsis ha tocado a la parte rica, no a una sociedad desheredada o del llamado tercer mundo, donde las cosas asi solo dan mucha pena, esto va para todos, hay que analizar profundamente el uso de las energías, unas porque son finitas y otras porque no son alternativas por peligrosas e incontrolables, habrá que ajustar la economía mundial, la afectación del impacto sobre la producción y la economía mundial será, si no ponemos todos de nuestra parte, muy dura y cuando esto ocurre, vuelve a recaer la desgracia sobre los más débiles.