Tribunal
Supremo, Tribunal Constitucional, Barcenas, Blesa, Blanco, Urdangarin, Gürtel, Bankia, Caso Noss, etc., en definitiva,
justicia, políticos, el entorno real, con
sus escándalos hacen aguas, ya no se puede esconder una realidad que ha
necesitado de la crisis económica de España para salir a flote, y esta crisis
que nos maltrata como sociedad, puede ser el principio que nos permita corregir
esta situación injusta que viene siendo así durante muchos años. Gracias a la
gravedad de la situación española, se ha descubierto el pastel, porque la CE ha
tenido que meter las narices dentro del gobierno del país porque ha llegado a
estar en juego el euro y la CE por entero.
Consecuencia
de ello el gobierno español, y todos los políticos y estamentos de gobierno y
judiciales españoles, están excesivamente nerviosos, es por la intervención
europea, no lo sé, pero trataremos de analizarlo porque el tema nos afecta a
todos y de qué manera. Qué circunstancias hacen que todos estén fuera de tono:
la mala situación de la economía no, esto es una consecuencia de sus nervios,
porque está quedando en evidencia que la crisis económica la han venido
forjando ellos, todos los políticos y entidades anexas, que de una forma u otra
vienen gobernando España, es la inestabilidad social, tampoco todo esto es otra
de sus consecuencias. Es entonces su propia inestabilidad esta si es la
autentica razón, ya la hemos encontrado, bueno pues localizado el problema
sigamos analizando.
Porque los políticos y
los distintos organismos sienten tanta inestabilidad, que les hace perder los
nervios y con ellos la cordura, la razón, y las facultades para ejercer como
guías de la sociedad que deben representar y defender. Ya hemos dicho que no
son los problemas de la economía, de la deuda soberana, ni nada de eso, es que
ven como su mundo, lleno de prebendas, vicios, sobornos, falsos honores,
egolatrías, lujos, reconocimientos y poder sobre todo PODER. Se les está
derrumbando frente a sus ojos incrédulos ante la realidad que les sobrepasa.
No lo duden, ellos en
la situación en que se desenvuelven, ya saben que su sistema de vida y de hacer
política, ya no sirve, la sociedad del bien estar relativo que sus antecesores crearon,
e hincharon una y otra vez para que les siguiéramos adorando como dioses, les
ha sobrepasado, y aun viéndolo venir, se han aferrado todos a la ilusión, de
que algo ocurrirá que hará girar la rueda 180 grados, y lo que es peor, que la
sociedad estaba tan aborregada que nunca les juzgaría.
Y no ha sido es así,
sino más bien todo lo contrario, “lo que puede acabar mal acabara mal” y así ha
sido, ahora ellos ven que su mundo dará un vuelco, mejor dicho, ya lo está
dando y ellos ya no controlan donde irán a parar sus vidas, sus trabajos y todo
lo demás. Y al igual que usted o yo, y el amigo en paro que todos tenemos, los
políticos están nerviosos y muy desquiciados, porque ellos piensan que tienen
mucho más que perder que usted, yo, y mi amigo en paro. Este es el análisis de
la situación, de España.
Solo así se puede
explicar porque no pueden terminar con los problemas de España, del
desequilibrio presupuestario, de las caídas del PIB, del desempleo, y del miedo
al ridículo, problemas que evidentemente, han creado ellos mismos ayudados por
su inconsciente ambición y por unos poderes que no están nerviosos, si no todo
lo contrario, están perfectamente organizados y coordinados, construyen
estrategias a corto, medio y largo plazo, me refiero a los especuladores y
mercados internacionales, mientras nuestros responsables políticos estaban
pensando como enriquecerse y como salvar su culo.
Lo malo de esto no es
solo donde hemos llegado, sino quien nos sacara de este pozo, porque no lo
duden, esta clase política que nos ha traído hasta aquí, no nos va a sacar, una
porque no saben, y otra porque para sacarnos debería de inmolarse a sí misma,
para dar paso a otra forma de hacer política y naturalmente a otros actores
políticos, más limpios, más preparados, menos viciados, si no lo hacen como
demócratas, tendremos que coger el toro por los cuernos y tomar las riendas del
país nosotros la sociedad.
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