Pocas frases habrán tenido un eco tan
persistente y desafortunado en la política catalana de los últimos 35 años como
aquella que el entonces presidente de la Generalitat Pasqual Maragall pronunció
el 24 de febrero del 2005 en el Parlament dirigiéndose a la bancada de CiU: "Ustedes
tienen un problema. Y ese problema se llama 3%", de ello hace diez años y todavía no se ha
encontrado ningún tres por ciento por ningún sitio
Poco se
imaginaba Pascual Maragall que aquella replica política en medio del fragor de
una sesión del Parlament, se arrastraría como una culebra siempre lista para
saltar y morder emponzoñando la política catalana, azuzada por cualquiera de
los partidos políticos que la necesiten, la lanzan sobre Artur Mas sobre CdC o
sobre la política general catalana. Todos saben que esta por el Parlament y lo
bueno del caso es que todavía hoy, no se ha visto nunca, uno ya piensa que es como
aquel monstruo del lago Ness que aparece y desaparece según la niebla o la
necesidad de ensuciar el clima político catalán.
Recordemos que la alusión al presunto
cobro, por parte de Convergencia, de un porcentaje del presupuesto de las obras
adjudicadas por el Govern en la época de Jordi Pujol nació el monstruo por
primera vez y a pesar que hubo una retractación de Maragall, y no me creo que
fuese por necesidad del apoyo de los convergentes liderados por Artur Mas para
sacar adelante la reforma del Estatut. Simplemente se dio cuenta que una cosa
es atacar a la oposición en una réplica con lo que sea y otra muy distinta
probar que lo que se dice es más que esto, un ataque de oratoria y retórica
política.
Sea como sea la cuestión es que si en España
hay algo más investigado políticamente y judicialmente es este tres por ciento que nunca se encuentra,
ha sido buscado entre la familia Pujol, en CIU en CDC, en Artur Mas, en
empresarios de la construcción, en ayuntamientos, en la propia Generalitat y no ha habido manera de que alguien lo
encuentre, yo creo sinceramente que quizás existió, porque no, pero el monstruo
ya debe estar muerto, quizás porque una
cosa es que hayan políticos defraudadores y otra muy distinta que la política
catalana se base en un fraude del 3% las
cosas son hoy son muy distintas.
Pero el fantasma del 3%. Reaparece cada
vez que hay motivos políticos para combatir a la política, apareció con el
estallido del 'caso Palau' -cuando la investigación del saqueo del Palau
de la Música destapó el presunto pago de comisiones de la constructora
Ferrovial a CDC a través de la institución cultural, hecho que esta sub judice
y que se centra en un personaje que no es el partido CDC, y volvió a asomar la en
el caso Pujol, a las puertas de una
campaña electoral, la del 27-S, de trascendencia incuestionable.
Y sigue apareciendo como hoy mismo; siempre
con bombo y platillos y previo aviso a los medios de información agentes de la
Guardia Civil de Madrid, Barcelona y Tarragona y representantes de la Fiscalía
Anticorrupción han registrado las sedes de CDC y de la Fundació Catalanista i Demòcrata (CatDem), vinculada al
partido que preside Artur Mas,
creo que con la de hoy tres veces, además los ayuntamientos de Sant Cugat, Figueres, Lloret de Mar y Sant
Celoni han detenido a los tesoreros
Convergència Daniel Osàcar y hoy a Andreu Viloca y muchos mas. La operación forma parte de una investigación sobre el
supuesto pago de comisiones ilegales del 3% de la constructora Teyco,
propiedad de la familia Sumarroca
-apellido estrechamente ligado a CDC y a Jordi Pujol.
Los registros de hoy se engloban en la tercera fase de la llamada Operación Petrum, que se inició hace
más de un año con las investigaciones contra Daniel Masagué, alcalde convergente de Torredembarra, que fue
acusado de haber recibido 1,43 millones de euros de siete empresas controladas
por la familia Sumarroca a cambio de contratos de obras públicas, como la
construcción de un aparcamiento y la gestión del alcantarillado. En el curso de
esa investigación, el pasado 23 de julio fueron detenidos el alcalde Masagué,
el exconsejero delegado de Teyco Jordi Sumarroca -hijo de uno de los
fundadores de CDC- y dos familiares de este, hechos que hoy en día también
están en proceso judicial.
Todo ello da una idea de que la fiscalía
no están buscando la verdad que no existe, sino montándola, porque es
perfectamente posible que con tanta información de cifras y más cifras se pueda
casar alguna correspondencia que no tenga nada que ver con la base del delito
del 3%, pero que si sea o se aproxime al 3% de alguna comparación numérica, y
esto bien montado a ver como se rebate,
es imposible porque no es real y por mucho que quieras una cosa irreal no tiene
explicación.
Lo que es evidente es que están dando
vueltas a la misma salsa, una salsa que no terminan de ligar las fuerzas
policiales, los fiscales anticorrupción, y los jueces al servicio del gobierno
de España y por supuesto del PP. Está
claro que de todas formas jamás una falsa acusación habrá dado tanto juego político
como la serpiente del tres por ciento.
Desde el 9-N sabemos por orden de quien
actúa la Fiscalía. La espectacularidad de la operación deja claro su objetivo: Artur
Mas, CDC y su fundación todos están revisados por todas partes, pero en 10 años no
han encontrado nada porque no hay nada que encontrar salvo como decía antes
alguna coincidencia entre miles de cifras que puedan montar una trama, que no
ha existido más que en la pobre cabeza de Pascual Maragall en un día de nervios
en el parlamente de Catalunya. Pedimos y exigimos limpieza y normalidad en el
ejercicio de la justicia. No puede seguir la publicidad de las intervenciones
de la fiscalía y la guardia civil, la justicia debe de actuar en silencio y
secreto porque si lo avisas de antemano, suponiendo que haya algo que esconder
lo esconderán o no es así.
Esta es una lógica policial clarísima, el
no cumplirla demuestra que no hay delito porque de la misma manera que se
enteran los periodistas que ellos quieren, se enteran los demás porque uno se lo
dice al amigo este a otro etc. Y hay una advertencia que quiero hacer a los
miembros de CDC y a Artur Mas. No den más
explicaciones no se defiendan más ante la prensa ni ante la opinión publica en
democracia es la justicia la que debe demostrar la culpabilidad o el delito de
alguien y no al revés, en democracia todo el mundo es inocente hasta que se
demuestra lo contrario, pues por favor dejen que lo demuestren y entonces ya se
defenderán legalmente y si no lo
demuestran los culpable serán ellos así de sencillo.
Paciencia amigos independentistas nos
tenemos que cargar de paciencia los ataques calumnias y dificultades a los que
nos someterán de ahora en adelante no son nada a lo que ya hemos soportado la
situación toca a su fin para bien o para mal solo quedan todavía mucho que
hacer y cada día va a ser peor porque si con todas las policías judiciales y
antifraude en pie de guerra no han
podido parar la Catalunya independiente, me temo que solo les quedarán dos salidas
el acuerdo de cómo nos separamos o el uso de las fuerzas armadas, porque
olvidémonos de que se acuerden que existe la democracia, pero en ambos casos Catalunya
obtendrá lo que buscamos la independencia.
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