Qué triste espectáculo el visto ayer en el Debate de la Nación, que clara y diáfana muestra de la verdadera situación política de España mostraron sus señorías, que circo se han montado los mismos españoles que hace 50 años hacían la misma pantomima en el semicírculo parlamentario, la única y escasa diferencia estriba en que entonces eran Una Grande y Libre y ahora son, Dos, inútiles engreídos, y mal educados.
España sigue anclada en su dictadura de hecho, ahora denominada democracia pero que en realidad es otra forma de dictadura con dos dictadores en lugar de uno solo. Como en tiempos pasados quedo claro que ni tienen idea de hacer política, ni saben plantear ninguna solución, y que solo están allí para ganar unos sueldos y prebendas muy suculentas. Después de la pobrísima intervención de los dos principales actores del espectáculo, que consistido en el consabido “y tu mas” propio de chiquillos en el colegio, asomo la verdadera actitud antidemocrática de los españoles, que siguen añorando la dirección caudillista del todos somos uno, grandes y libres y los demás no importan.Terminado el debate rabieta del líder del PSOE y el del Partido Popular, los diputados de las cortes españolas, casi en su total mayoría, se marcharon haciéndolo ostensiblemente y ofensivamente, hasta el punto de impedir la continuación e intervención de otro diputado, que por lo visto no tenía nada que decir a España, porque o no debía ser diputado de las cortes españolas, o la España que representa no es admitida por el resto de los mal educados diputados, esos Grandes y Libres como les hizo creer el general que aún recuerdan vivamente en sus formas y actos.
Lo cierto es que este diputado dio una lección de modos y formas que para sí quisieran los impresentables que se sientan en el hemiciclo con el único fin de aplaudir a su líder y abuchear al otro líder, pero eso si con una unidad que espanta porque la realidad que emana de la función es “entre estos y nosotros, una grande y libre” y los demás a callar y obedecer, así esta la situación en España no ha cambiado nada simplemente se murió uno y ahora son dos los caudillos que se van alternando.
Mientras gran parte de la sociedad española siga emperrada en imponer una grandeza que se perdió para siempre hace ya siglos que se conquisto a sangre y fuego y no por la unión de intereses comunes que derivó en reinados, republicas, y dictadores, fatuos y fallidos, hasta el punto de dilapidar todo atisbo de grandeza porque si la hubo en un momento de la historia de España, nuestro futuro no existe no podemos tenerlo siempre necesitara la España centralista del guía, del caudillo que añoran, una vez será un personaje otras una organización como ahora es el “euro grupo” pero estamos condenados a no ser nada por nosotros mismos, porque España no sabe todavía escuchar, aceptar las criticas, reconocer los errores, vencer el orgullo pernicioso y la mala educación,
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