Si como todo apunta habrá una solución más o menos consensuada para
limitar la debacle del euro, la ascensión imparable de las deudas soberanas, y la
recapitalización de los bancos, podremos decir que la crisis económica europea
se habrá detenido, pero no superado, que es lo que habrá que hacer a toda
prisa, de lo contrario la deflación o la estanflación de la economía se nos va
a instalar durante unos 15 años calculo yo.
Mi plan para que esto no ocurra tiene dos vertientes la política y la
económica, está claro que una sin la otra no funcionan bien, el problema está
en cómo conjugarlas porque la política es democrática y está en manos de la
sociedad, sus votos, y sus órganos legales, tales como congresos o senados o
ambos en muchos casos, esto la hace lenta en sus reacciones y máxime, cuando
este problema de la burocracia legal lo multiplicas por veintisiete.
Sin embargo, la economía no tiene nada de democrática, es rapidísima en
reacciones, no se debe a nadie es absolutamente libre, demasiado diría yo, y en
muchos casos bordea la ilegalidad, es decir política y economía son
completamente antagonistas, y sin embargo no hay más remedio que hacerlas
convivir en armonía más o menos paritaria.
Hay que dotar a la política de mucho más dinamismo y de dureza en su
toma y aplicación de decisiones. Para ello hay que insistir en la unidad
europea de verdad, hay ceder desde las naciones que la componen cuanta más soberanía
nacional mejor, hay que ordenar las leyes y la constitución europea, de forma
que sea de rango superior a las leyes y constituciones de las naciones que
formen la Unión.
Por ejemplo una ley o norma comunitaria ya sea de rango político o económico,
deberá reflejarse obligatoriamente si no tiene cabida en las, o algunas, constituciones nacionales cambiando estas,
sin dilación ni discusión alguna, así no podrán las naciones retener o alargar
en su beneficio y a forma de chantaje político algunas veces, aprobaciones y
aplicaciones previamente aprobadas y validadas por el consejo europeo en el
cual están representadas legalmente.
La Unión Europea debería ser consciente de que todo aquel País o Nación
que no esté de acuerdo en someterse a esta rigidez, deberá abandonar su estatus
de miembro permanente de la Unión Europea, no hace falta pensar en la expulsión
total podrá seguir formando parte de la misma UE pero
en calidad de asociado o agregado, pero no tendrá ni voz ni voto ni percibirá
ningún tipo de subvención del fondo europeo.
Tendrá las ventajas de libre comercio con la unión y podrá en el momento
que lo solicite y cumpla los requisitos y parámetros adecuados, pedir la reincorporación
total de pleno derecho a la Unión Europea, aceptando incondicionalmente las
leyes de gobierno de la Unión. La Unión Europea debe de comprender que es mejor
ser pocos y todos unidos, que muchos y
sin unión alguna. Este primer y gran paso nos llevaría sin duda al cabo
de unos años a la total unificación europea.
Una vez tomada esta decisión política, dura muy dura, deberían aplicarse
medidas reactivadoras de la economía europea, partimos de la base que ya se ha
sostenido la caída, lo que hay que hacer es buscar medidas de reactivación, las
dos primeras tienen carácter monetario:
1º.- Aumentar la masa monetaria circulante de
euros un 20% y a la vez devaluar el euro en también un 20%, es decir poner el
euro a un cambio de 110 dólares más o menos.
2º.- Bajar
el interés del dinero al 0,25% hasta 2014, a partir de este año, en que esta
bajada y la devaluación habrán reactivado la producción y quizás hecho subir la
inflación, ir aumentando el coste del dinero en medio punto anual hasta el 2020
(final de la década maldita) con el dinero al 3,25 %,
3º.- dejar que la inflación suba hasta el 4%
como tope máximo llegada a esta cifra, si es que llega, se estabilizara y
empezara a bajar por la presión del aumento de los intereses y por la
estabilización de la reactivación de la economía que en teoría habrá tenido
lugar.
Con estas medidas económicas se reactivaran las exportaciones y la
producción interna, el consumo interno se acelerara, así como también el flujo
crediticio a las empresas y particulares, con estas medidas se debería de
reactivar el mercado laboral, las importaciones se retendrán al subir su precio,
esto equilibrara la balanza y evitara la posibilidad de una excesiva inflación.
El conocimiento de los intereses del dinero y su evolución prefijada, permitirá
la concesión de hipotecas y créditos, calculados en lo que respecta a sus
costes de amortizaciones, dato objetivo y que es muy necesario para la toma de
decisiones de inversión en empresas y del gasto por los particulares. Por
supuesto será necesario el control de la evolución de los planes establecidos,
de ahí la importancia de los puntos relacionados con la gobernabilidad política
de la unión, porque si algo no funciona como sería de esperar, no se puede
estar un año para rectificar en un sentido u otro.
La Unión Europea debe entender que en estos momentos no es ningún coloso
económico, más bien al contrario, y no puede permitirse sostener una divisa que
está muy por encima de su valor real, esto debe pararlo de inmediato porque es
lo lógico, todos los parámetros que dan valor a una divisa están por los
suelos, no hay productividad, hay deuda galopante, desempleo casi al 10%, no
tenemos recursos propios, mi pregunta es clara, que da valor al euro para que
se cotice un 40 % por encima del Dólar, solo hay una explicación la
especulación internacional, todo esto es duro muy duro pero es cuestión de
decir basta, estamos aquí, y desde aquí remontaremos para ser verdaderamente el
gigante europeo que queremos ser.
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