Por un lado es de
agradecer que la política española se empiece a mover al respecto de encontrar
una solución al proyecto catalán respecto a la independencia de España, toda la
prensa española los partidos políticos encabezados por el PP y seguidos por el
PSOE han empezado a tomarse en serio el hecho que la posición catalana no es
una negociación, sino un proyecto decidido.
Los mensajeros oficiosos
del gobierno del PP. Ya no son ni siquiera considerados por las nuevas fuerzas políticas
catalanas que han sabido remodelarse profundamente para convertir el proyecto civil
soberanista en un proyecto común y transversal en que se agrupan la sociedad y
la política, asi el próximo día 27 de septiembre se llevaran a cabo unas
elecciones generales en que no se votara a partidos políticos, (bueno algunos sí)
sino que se votara a agrupaciones compuestas por parte de la diversidad de la
sociedad catalana y de la política todos a una.
Es evidente que el acto
en sí de ese día de septiembre, son unas elecciones generales pero en ellas se
esconde una consulta a la sociedad catalana al respecto de su futuro como
estado e independencia. Los movimientos políticos españoles ya no pueden ir en
la dirección de prohibir el acto en si ahora su problema está en intentar
convencernos que no son más que unas elecciones y que no es una consulta ni un plebiscito
y por lo tanto solo saldrá de ellas una composición de un nuevo parlamento catalán.
Efectivamente esto es así
pero el problema de los políticos españoles es que niegan y se niegan a sí
mismos que la composición del nuevo parlamento reflejara los votos emitidos por
el pueblo de Catalunya y que precisamente esto dará la suma exacta de las
fracciones sociales que quieren la independencia como camino de futuro de Catalunya
y las que no y esto será así queramos o no
Catalunya quiere ser un
estado independiente de España y hay muchos motivos para ello, el sentimiento
de un pueblo que siempre se ha significado por sus diferencias y que no han
sido consideradas por España que siempre ha querido reducirlas y eliminarlas, pero
que ni después de tres siglos de dominio absoluto lo ha conseguido, ahora la
pregunta más común en España es que si
esto ha sido así, porque ahora hay una actitud tan drástica por parte de los
catalanes, que ha cambiado que se haya radicalizado la situación.
La cuestión que
precipita esta radicalización del problema, no es otra que la supervivencia
económica del país. Tal y como van las cosas, y en contra de las tesis del
gobierno español, Catalunya sabe que o nos segregamos o nos hundimos en la más
tremenda de las involuciones económicas y políticas de España, esto es lo que
hemos visto los catalanes y lo que exigimos a nuestros gobernantes: Por favor
sáquennos de esto porque el final es la vuelta al siglo XX y concretamente al
1939.
España nos niega que
esto vaya a ser así y para intentar frenar este movimiento secesionista nos
amenaza con todo lo contrario, si os separáis de España no seréis nada lo
perderéis todo no os dejaremos estar en Europa no os darán financiación
perderéis un 20% de vuestro PIB etc., pero como siempre digo la realidad es
tozuda y siempre pone las cosas en su sitio y desgraciadamente el sitio de
España en esta realidad económica actual es la descomposición de su sociedad, y
de su clase media, para llevarla a la penuria económica dicho más claro a tener
que luchar casi por la supervivencia.
Todas las promesas del
gobierno español fallan más pronto que tarde, no hay ninguna que se pueda poner
como ejemplo de acierto y no voy a repetir todas las barbaridades que este
gobierno ha legislado y gestionado con una gran habilidad para llegar al
fracaso más estrepitoso en cada una de ellas, hoy llegados a este punto quiero
repetir a los españoles lo que nos espera y porque nosotros no queremos vivirlo
si podemos.
Después de los rescates
de la banca que era el principal problema de los políticos españoles que tenían
que evitar a toda costa que la CE entrase a investigar las cuentas del estado
español, la economía sigue sin
resolverse. La ayuda concedida al país no fue gratuita, y los ajustes impuestos
terminaron por hundir más a la sociedad en una recesión, es cierto que las
condiciones generales de la economía mundial y europea y los sacrificios de los
españoles han frenado la caída pero no
nos engañemos no hay visos de mejora. Es más, la situación actual hace dudar de
si España será capaz algún día de pagar de
volver a la situación en que se encontraba al principio de la crisis.
Todas estas razones y
otras son las que nos mueven a muchos catalanes a buscar la soberanía como
nación independiente. Podrán decirnos que somos egoístas pero no queremos pasar
por todo esto porque por tamaño y estructura empresarial, comercial, y social,
nuestra capacidad de salir de esta situación es mucho más real que hacerlo formando
parte del estado español totalmente desequilibrado, que la política centralista
ha venido forjando.
Sé que nos acusan que somos egoístas pero creo que no,
porque durante todo este tiempo hemos estado ahí y últimamente hemos
contribuido hasta estar hoy pasando por serios problemas económicos, pero ya no
se nos puede pedir más, o dicho de otro modo, visto lo que España ha hecho con
todos nuestros sacrificios, vemos que no ha habido equilibrio alguno, sino todo
lo contrario se ha tirado todo por la borda no queda nada peor todavía queda
proporcionalmente menos que hace 35 años atrás.
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