Mi artículo publicado ayer en referencia al
caso de la detención de Díaz Ferrán, creo que requiere una ampliación más
amplia que de la tremenda dimensión del problema del poder político y el
económico que impera en este país se que darán escalofríos a muchos de mis
lectores, pero es a mi entender la verdad desnuda y terrorífica del país que
nos cobija, y que demuestra que España no puede mantenerse en esta
configuración social nacional, económica, ni mucho menos política por mas
tiempo.
Lo normal en casi todos los países
considerados occidentales y democráticos, es que la economía que los mueve se
encuentre dividida en dos, la economía pública y la economía privada, la
primera siempre es deudora por naturaleza social y la segunda es la que juega
el papel de ser la expansiva la que enriquece el PIB del país. Aquí en España
esto esta alterado, en nuestro país hay una especie de oligarquía y una
creencia puesta en manos de una elite imperialista y retrograda, que quiere
controlar la vida de una nación para uso y beneficio propio.
Así que España no ha dividido realmente su
economía nacional en dos ramas, lo que ha hecho es simularlo, para parecer un
país moderno y poder navegar entre dos aguas esto ha podido subsistir hasta que
las economías se van convirtiendo en dependientes unas de las otras y se
destapa el pastel. Incomprensiblemente muchos se preguntan cómo puede ser que
un país como España, el cuarto en importancia de Europa este a niveles de
ineficacia casi como Grecia y Portugal por citar algunos ejemplos, y la razón
no es otra que la falta de una economía de tipo emprendedora y dirigida por
emprendedores y con capitales privados y de riesgo.
Porque creen ustedes que España es el país que
más pequeña empresa tiene, y más autónomos en proporción hay de europa, una
causa es la falta de educación empresarial del riesgo, y otra que el gobierno y
los políticos no favorecen la creación y expansión de empresas, las únicas que
tenemos son reminiscencias de la falsa privatización de la empresas de
servicios de gestión pública, las grandes empresas españolas derivan de
servicios ministeriales públicos, Telefónica, Renfe, las eléctricas, las
empresas de obra civil, y las de gestión de servicios, agua, luz, gas, petróleo
el caso de Repsol por ejemplo, luego están algunas de sanidad y la banca.
Esto lo puedo justificar por el siguiente
razonamiento: Todas las grandes empresas nacionales están al servicio de la
política, como nodrizas y cementerio de elefantes, todas están creadas por
medio del estado, traspasándolas a amigos o ex políticos que siguen unas
funciones que hacia el estado, hasta que la presión general europea y mundial
aconsejaba cambiar el esquema, pero fíjense que ninguna ha creado clústeres
industriales, se han limitado a hacer justo lo que hacían.
Ejemplos: Telefónica, ha creado alguna
empresa de aparatos telefónicos, está metida creando investigación paralela en
chips, programas informáticos, ha creado alguna marca española de ordenadores,
no se limita a hacer lo que hacía suministrar servicio de voz y datos a través
de la red que ya casi tenia. Las eléctricas es el caso más grave todavía, no
solo no han creado desarrollo, sino que han hecho lo imposible para aniquilar
los intentos de las energías renovables, creando un desorden de tal magnitud
que se ha matado la rentabilidad y las ganas de desarrollo nacional de empresas
de esta tecnología.
Las empresas de construcción y estructuras,
no han hecho nada más que construir lo que el gobierno les ha dicho, pero no
han desarrollado nada mas, sabiendo que en España no habría más sitio para
carreteras y autopistas ni AVE. se murió el negocio y se han marchado todas,
sin dejar aquí otra industria de lo que fuese que mantuviera empleo o desarrollo,
coches, camiones, escaleras mecánicas, lo que sea. Y así cualquiera de las
ramas de las grandes estructuras industriales de este país. No me valen en este
caso ZARA y “El Corte Inglés” que diría que son la excepción que justifica la
regla, y creo que es porque sus productos nunca los ha hecho el estado.
Esta
es la realidad y el colofón de la situación de muerte por suicidio de este
país, su tremenda centralización,, su egoísmo político, su reminiscencia
imperial, que debe de circular por la sangre de muchas grandes familias y
políticos españoles, han impedido que España se desarrollara fuera de su
tutela, cuando sucedió la II republica no se la dejo ni intentarlo, se dinamito
con una guerra civil brutal, se continuo con una dictadura que volvió todo de nuevo
a su sitio, y cuando esta falleció, se creó el estado actual que ni es libre,
ni democrático, ni siquiera gobierna para los españoles sino para su España
solo la suya.
Ahora
lo peor es que vamos a pagarlo todos los españoles, los que no nos han dejado crecer,
a los que nos han exprimido haciéndonos creer que nos convertían en una
potencia europea, pobres infelices, cuando ha llegado la hora de pagar el gasto
(sus gastos) ahora si somos buenos y necesarios, por eso ahora se habla de
reestructurar y reunificar el estado de las autonomías, no es por otra cosa que
para evitar que algunas se den cuenta de la realidad, como pregona Catalunya, y
se empiecen a considerar porque no tienen medios para subsistir, porque no
tienen empresas para emplear a sus trabajadores, porque todo el capital está en
Bankia y los bancos con sede en Madrid, y lo mismo con las grandes empresas del
país como ACS, Repsol, etc.
No
sé si se darán cuenta en Bruselas de este desastre, pero es así, España no
tiene economía privada real sino la misma economía pública que dejo la
dictadura, repartida entre sus sucesores y ampliada por los ex políticos, sus
primos, sobrinos, hermanos, etc. esta es la España que ahora no puede salir de
su pozo porque ni saben los que nos dirigen, ni les importa, ellos están fuera
de los problemas de subsistencia, esta España me temo no tiene, no puede tener,
continuidad o me equivoco
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