miércoles, 22 de febrero de 2012

LA MALDICION DE LA EXUBERANCIA ECONOMICA ESPAÑOLA


Me temo que estemos entrando en una situación de pobreza tercermundista galopante e irreversible, tremendo comienzo como para animarles a que sigan leyendo, pero les aconsejo que lo hagan verán la triste realidad y quizás les ayude a prepararse. Para lo que tiene que llegar. Empecemos por el principio.

Ya conocen mis asiduos lectores, que por causa de la exuberancia inmobiliaria que disfrutamos en la década del 2000 al 2010, España se desequilibro por completo, se cambio la economía industrial y productiva por la construcción, crecieron millonarios del cemento armado, que no hicieron más que derrochar sus pequeñas fortunas en casas muy grandes, coches muy caros, y lujos exorbitantes, pero ninguno creo nada, solo casas y pisos de los que muchos están hoy en el pasivo de los bancos, y de nuestras economías particulares, porque al fin y al cabo somos los que los vamos a financiar.

Pero esto con ser uno de nuestros males, no es el peor, el peor también lo he repetido innumerables ocasiones, es que se desequilibro la demografía de España. Vamos a analizar el suceso

Año / década
Habitantes
incremento
1940
26.014.278
-
1950
28.117.873
2.103.595
1960
30.582.936
2.465.063
1970
34.008.759
3.425.823
1981
37.742.561
3.733.802
1991
39.433.942
1.691.381
2001
41.116.842
1.682.900
2011
47.190.493
6.073.651

La tabla confeccionada parte de después de finalizar la guerra civil española, se puede observar que la natalidad o incremento de población, crece durante las primeras cuatro décadas a un ritmo ligeramente superior a dos millones, la dos primeras, y de tres millones, las dos siguientes. Pasado este periodo, la sociedad española se reprime, las dificultades, la vida moderna, el equilibrio general y económico se regula y se establece un crecimiento de 1.6 millones por década prácticamente, y ahí llega la explosión de la exuberancia irracional económica de la construcción y el euro, y España se vuelve loca y en una sola década crece 6. Millones de habitantes.

El problema se agudiza porque evidentemente no son por nacimientos, “demasiados polvos para tanto lodo” es una demografía importada, lo racional es que España hubiese crecido como mucho dos millones, es decir nos hubiésemos situado en los 43 millones de habitantes, pero no solo es la cantidad, el principal problema sino el desequilibrio de la pirámide de edades, porque el excedente de habitantes habidos, todos han sido personas en edad de trabajar y la mayoría sin cualificar,  al principio esto era buenísimo porque el aumento de la cotización a la caja de la Seguridad Social Nacional, era desproporcionadamente buena había más cotizantes que perceptores de pensiones, así ocurrió lo que ocurrió, el PSOE no supo qué hacer con tanta bonanza y la dilapido.

Ahora esta situación se ha girado al lado contrario, ahora todos estos obreros añadidos, son los que engrosan las listas de subsidios del paro, que junto a los jubilados naturales, y los provenientes de los ERES cierres patronales y demás estamos en unos ratios insostenibles, hecho que el nuevo gobierno calla, porque no sabe cómo explicarlo ni cómo solucionarlo. Esto explica también porque los jóvenes no encuentran trabajo, la juventud española que llega a la edad de trabajar, se encuentra con un mercado de trabajo desequilibrado por dos factores, uno por la poca oferta de trabajo y el otro por la tremenda cantidad de trabajadores que están taponando la posibilidad de incorporación de los que llegan.

España no podrá por si misma solucionar esta situación de ninguna de las maneras, jamás España podrá dar ocupación a 3.5 millones de trabajadores, para quedarse en un desempleo de 2 millones de trabajadores, que situaría un ratio del orden del 10/12 % de desempleo. Esta situación no exagero, o la explica el gobierno en Bruselas o si la quiere ocultar nos vamos a la ruina total, en dos o tres años estamos a la altura de Marruecos o Argelia, quemándonos a lo bonzo en las plazas de los pueblos y ciudades de nuestro país, o en plena revolución pidiendo lo que el estado y el país no nos puede arreglar.

Impresionante verdad, durísimo diría yo, pero real es así no hay forma de ocultarlo, o se recompone la demografía mediante ayudas  a la repatriación del excedente de trabajadores en las edades adecuadas, o no va a poderse paliar el paro juvenil, o nos vamos a quedar sin jóvenes, porque estos si se marcharan no les quepa duda, pero el gobierno parece que lo único que le importa, es de momento salvar a los bancos y recortar los presupuestos, como si esto fuese a servir para algo, los problemas son los que son y no afrontarlos es de suicidas e inconscientes, porque unos son resultado de los otros y viceversa, y sin afrontar las dos soluciones no habrá ninguna solución.  

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