Hace tiempo que estoy escribiendo sobre el
desmoronamiento general de la UE ni funciona la economía ni funciona la política
aunque creo que es la primera la que hace tambalear a la segunda de todas
maneras da lo mismo que fue primero si el hubo o la gallina la cuestión es que
se muere la gallina de los huevos de oro y detrás vamos todos los europeos.
Hoy se han dado a conocer las previsiones
económicas de la Comisión Europea para España y el conjunto de la Unión Europea
y ambas pintan peor que hace seis meses, es decir cómo les decía no vamos hacia
adelante sino hacia atrás y ahora lo confirma Bruselas que calcula que el
crecimiento en la zona, será este año del 0,8% cuatro décimas inferior al
esperado y, lejos de repuntar hasta el 1,7% en el 2015 como se esperaba en
mayo, ya prevé que sólo alcanzará el 1,1%.
Es evidente que esta situación de ralentización
de la economía general de la unión afectará a la economía española, Bruselas la
corrige para el 2015 y la rebaja del 2,1% que espera el gobierno español a solo
un 1,7%, y con un paro del 23,5%. La tan cacareada aceleración del crecimiento
económico en España se aplaza una vez más, ahora hasta el 2016 no se espera que
la riqueza nacional crezca por encima de la barrera del 2% (Bruselas vaticina
una expansión del PIB del 2,2%, y una caída del desempleo hasta el 22%).
El empeoramiento de la situación económica
general complicará todos los esfuerzos de los gobiernos nacionales para cumplir
los objetivos de reducción del déficit, (que son la principal causa del
desastre y no la salida como impone Alemania) en el caso de España es ya un
suicidio pretender aceptar estas previsiones España no crecerá sobre el 2%
hasta que a la ranas les salga pelo, o España deje de una vez de pertenecer al
euro.
Las perspectivas económicas que figuran en
el borrador de presupuesto planteado por el gobierno de Mariano Rajoy para el
2015 no garantizan que España vaya a cumplir sus objetivos de reducción de
déficit para el próximo año. El gobierno espera que los ahorros resultantes de los
nuevos recortes y reformas junto con el repunte de la actividad económica, compensen
de sobra los anunciados recortes de impuestos y una relajación en la política
de contratación del sector público, que el PP se ve obligado de anunciar por
que las elecciones están a la vuelta de la esquina, pero Bruselas calcula que
el déficit se situará en el 4,6% del PIB, es decir, cuatro décimas por encima
del objetivo pactado para el 2015.
Que serán más muchas más porque la
realidad política de España a la que Bruselas no quiere entrar todavía va a dar
un giro de 180 grados a toda la política conservadora y centralista del gobierno
actual, yo no creo que este gobierno pueda llegar al final de la legislatura
por un lado el acoso de Podemos que es mucho más rápido y fuerte de lo que se
esperaba y la tozudez del gobierno central de mantener sin dialogo ni salida
alguna al conflicto España Catalunya, está haciendo caer la confianza de los
inversores internacionales y lo malo es que el PP sigue pensando que es culpa
de Podemos y de Catalunya, cuando la realidad lo que asusta al mundo económico,
es que el gobierno de España no hace nada para rectificar el camino hacia ninguna
parte, que Rajoy ha llevado a la política y la economía española.
Será a finales de mes cuando la Comisión
Europea se pronuncie sobre cómo actuar ante esta posible desviación
presupuestaria. No está claro que la reacción vaya a ser pedir más recortes para
asegurarse de que cumple sus objetivos de déficit. El estancamiento económico y
las malas cifras de empleo e inversión en la zona euro están haciendo virar
poco a poco la política económica europea y no se descarta que Bruselas opte
por tolerar cierta relajación en el saneamiento de las cuentas públicas en
varios países de hecho de los más grandes después de Alemania me refiero a
Italia España y Francia.
Pero de momento no hay nada concreto la
situación solo que la economía y el empleo no mejora al ritmo necesario. La
Comisión Europea utilizará todos los medios y recursos a su disposición para
crear más empleo y crecimiento en Europa, ha declarado Jyrki Katainen,
vicepresidente de la Comisión Europea para Empleo, Inversiones y
Competitividad. La gran apuesta del nuevo ejecutivo comunitario, que tomó
posesión este fin de semana, pasa por el lanzamiento de un plan de inversiones
valorado en 300.000 millones de euros. Pero esto no es la solución es
simplemente un parche que se perderá en medio de las necesidades reales de la economía
europea.
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