sábado, 21 de marzo de 2015

ALGUN DIA PODREMOS DEJAR DE HABLAR DE GRECIA… O NO INTERESA


Los presidentes de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y del Consejo Europeo, Donald Tusk, anunciaron ayer una ayuda de emergencia para Grecia procedente de fondos europeos no utilizados por valor de 2.000 millones de euros. Esta ayuda es casi una acción de caridad social puesto que se da ante la perspectiva social insostenible que soportan muchos ciudadanos griegos.

Juncker ha recordado que en la cita a siete de ayer entre Grecia, Alemania, Francia, la Comisión Europea, el BCE y el Consejo Europeo se comprometió a liberar fondos no utilizados del presupuesto comunitario en favor de Grecia y que hoy se ha cifrado esa cantidad en 2.000 millones de euros, que -subrayó- “no irán a alimentar las arcas del Tesoro griego, sino a apoyar solidariamente los esfuerzos de crecimiento y la cohesión social en Grecia”. Junkcer ha señalado que “Grecia, que conoce un problema social grave, que ha sido denominado de crisis humanitaria y que en efecto es una crisis humanitaria, y tiene la facultad de crecer subdesarrollada, necesita ayuda del presupuesto europeo”.

La medida llega horas después de que los socios de la Unión Europea volvieran a dar un ultimátum al Gobierno griego para que presente un nuevo plan de reformas a cambio de nuevas ayudas. La situación financiera del país es desesperada. Este mes, el país afronta vencimientos por 4.500 millones en intereses de bonos y letras y por 1.500 millones del rescate. Hoy mismo, Grecia pagará 350 millones al FMI. Pero el temor a que el país se quede sin liquidez no hace más crecer. En abril afrontará vencimientos por 2.800 millones; en mayo, por 2.300 y en junio por 3.500. Esta ayuda de emergencia de 2.000 millones de euros de la UE llega en un momento crítico para el país.

Y así llevamos hablando o escribiendo lo mismo día tras día la cuestión que flota en el ambiente económico mundial es  ¿Cuándo puede quedarse sin liquidez Grecia? Hay varios frentes que preocupan en estos momentos. El primero, la escasez de liquidez de las arcas públicas. RBS señala que en el primer trimestre del año su déficit puede situarse entre los 1.400 y los 3.400 millones de euros. Para el segundo trimestre, según cálculos de la agencia Bloomberg, esta escasez de liquidez ascendería a los 5.700 millones de euros.

El déficit fiscal de Grecia pone incluso en cuestión su capacidad para pagar el sueldo de los funcionarios o las pensiones públicas. -Un Gobierno no debería estar en esta posición, porque es una situación muy proclive a que sucedan accidentes-, afirma Athanios Vamvakidis, analista de Bank of America, "creemos que en abril y en mayo el Gobierno pagará los salarios y las pensiones. Para todo lo demás, habrá retrasos en el pago". En este sentido, algunos medios griegos informan de que el ejecutivo heleno ha empezado a retrasar el pago a sus proveedores. En definitiva y aunque la visibilidad de la posición de liquidez exacta de Grecia es poco clara, todos los informes siguen sugiriendo que la capacidad de las autoridades griegas para afrontar sus vencimientos se mide en semanas".

Entre tanto la fuga de depósitos, que parecía haberse contenido tras la extensión del rescate a Grecia por cuatro meses acordada a finales de febrero, también se agrava con el aumento de la tensión de los últimos días. Según distintas fuentes, ayer salieron de los bancos griegos entre 350 y 400 millones de euros, el peor día en un mes, es decir, desde que se pactó alargar el rescate al país. Según el diario griego Ekathimerini, desde febrero han salido otros 10.000 millones de euros de los depósitos bancarios. Esto representa una caída total del 15% desde noviembre del año pasado.

Los bancos griegos solo tienen como vía de acceso a la liquidez el fondo de emergencia del BCE (ELA, por sus siglas en inglés), que el banco central ha elevado repetidamente en las últimas semanas. Y si sumamos estas salidas de depósitos a un empeoramiento de la economía (en especial de las finanzas públicas) y los mínimos progresos en la negociación, creemos que el riesgo de imponer restricciones a los pagos internos y externos han aumentado considerablemente es decir estamos a la vista de un “Corralito” y la verdad ver al caballo de Troya encerrado no parece una buena solución para la UE y por supuesto para Grecia.

Para evitar el control de pagos y eludir escenarios extremos como este, el Banco de Grecia podría haber acudido a las reservas de distintas entidades públicas, entre las que están el fondo de pensiones, hospitales y universidades,  entre las ultimas posibilidades que tendría el país están recurrir a fondos de los cuerpos del Estado, algo que según varias informaciones podría estar haciendo ya; incluso recibir un préstamo de un Gobierno extranjero como China, que ya compró letras helenas en las últimas subastas o que el  Tesoro griego consiguiera emitir más letras, pero el BCE impuso un límite de 15.000 millones y no parece factible que pueda elevarlo (de hecho ayer mismo se le negó a Tispras esta posibilidad).

Las declaraciones de los mandatarios europeos siguen recalcando la idea de que no quieren que Grecia salga del euro, pero esta hipótesis deja de ser un tema tabú. Se empieza a hablar de Grexident, concepto que resume la idea de que el país podría verse forzado a abandonar la zona euro por un "accidente", como el hecho de que se quedara sin recursos. Hace tiempo que mis seguidores conocen mi opinión al respecto yo creo que Grecia no tiene que esperar ningún accidente simplemente tiene que asumir su realidad y sus mala gestión económica durante años de sus gobiernos, reconocerlo y afrontarlo claramente ofreciendo a la UE su salida provisional del euro pero no de la UE creo que es la única y verdadera salida del conflicto económico griego

La creación de una especie de limbo económico es a mi entender la mejor solución para todos Grecia debe crear una nueva economía interna y para eso no puede hacerlo con el coste del euro debe crear también una moneda acorde a la realidad de esta economía a la vez esto permitiría al gobierno griego gobernar socialmente y económicamente al país haciendo devaluaciones y masas monetarias suficiente de la nueva moneda para activar la economía interna y que los griegos puedan consumir y rehacerse esto es evidente que con el euro no pueden llevarlo a cabo y no pueden pedir tampoco, que los demás europeos que no andamos tampoco muy sobrados les financiemos su problema.

La extensión por cuatro meses del rescate a Grecia solo da tiempo al país para seguir negociando con sus acreedores, pero no implica el desembolso de nuevas ayudas. Con todo, los expertos de RBS afirman que "una reestructuración de la deuda o un posible problema de liquidez no tendrían por qué traducirse necesariamente en la salida de Grecia del euro". Yo creo que se equivocan porque no es solo una cuestión de deuda sino de una estructura económica nacional que hoy no puede soportar al euro.

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