No nos
pongamos nerviosos no hay porque, el hecho de que surjan las amenazas de las
agencias de rating anglosajonas sobre
todo lo que se mueve en la economía europea, es lo que nos indica que vamos por
el buen camino, están molestos, ahora lo cierto es que son ellos los que no
saben qué hacer, en cierta manera nosotros tampoco, porque lo que se ha hecho
en la pasada cumbre de Bruselas, no es nada más y nada menos que poner de
acuerdo a 16 naciones, dotándolas de unas normas claras para unificar el
principal elemento de solución de sus problemas, la economía y la fiscalidad, para
que cada una de ellas actúe según su saber y necesidad y posibilidades, pero
sin salirse de un marco unificado con lo que se evitara que las diferentes
velocidades por aciertos y potenciales recursos, alteren a las demás economías del
euro.
Esto
significa mucho, y me imagino que esto es lo que pone nerviosos a los “BOY’S”
anglosajones, máxime cuando su caballo de Troya no está en el ajo para
enterarse de por dónde pueden ir los tiros. Desde aquí los europeos debemos ser
más sensatos y no ponernos a temblar porque hoy se redoblen los ataques económicos
y financieros desde los mercados internacionales, es lo lógico, las tesis franco
alemanas aceptadas por los 17 componentes la Unión que se engloban bajo el paraguas del
euro, sientan las bases para poder actuar ya a medio y largo plazo, por la
senda de la unidad marcada fehacientemente y férreamente por el control económico
y fiscal de todos para uno y uno para todos.
Ahora toca a
cada nación, empezar ya sin excusas a elaborar planes de reactivación de su
propio mercado, empezando por el consumo interno, y continuando por la
productividad, la exportación y el desarrollo industrial y de productos (I+D+I),
si esto se plasma en planes concretos, el BCE podrá ayudar y mucho ahora bien
si seguimos asustados quietos y “esperando que llueva café en el campo” ni el
BCE ni el FMI ni los mercados inversores pondrán un euro por nadie en europa.
Alemania por
ejemplo, ya tiene vía libre ya no debe de temer por tener que guardar sus
reservas por si al final tenía que sostener ella sola el euro, ya es cosa de
todos, Francia lo mismo y la verdad es que los países pequeños europeos excepto
Grecia y Portugal, que deben seguir sufriendo e ir a remolque, también tienen vía
libre para reactivarse, ahora desgraciadamente el problema se centra en Italia
y en España, de Italia no puedo opinar pues no tengo mucho conocimiento cierto
de la situación real de su economía, solo puedo pensar que al frente de la política
gubernamental hay un equipo francamente capaz de establecer un plan de rescate
interno, que surta efecto en pocos meses.
Y nos queda España
aquí sí que puedo y opino, y la sensación que tengo es mala muy mala, porque
hay dos problemas importantes que van a distraer todos los esfuerzos del nuevo
gobierno, el primero que más me preocupa a mí personalmente, son los 40 mil
millones de euros anuales que nos cuesta el exceso de desempleo (ese 10% de mas
que no podemos absorber en las condiciones estructurales del país) con esa rémora
encima, no podemos levantar cabeza, si el problema lo tratamos con las medidas
usuales que son subsidios y ayudas, esto es un coste crónico que se irá
incrementando año a año y que además, traerá consigo la amenaza de desestabilización
de la sociedad, porque ese 10% son 2,5 millones de obreros pero son más de 7
millones de personas afectadas en realidad, a las que hay que dar escuelas,
sanidad, y vivienda más o menos digna, esto es un coste brutal porque deberá correr
por parte del estado, y eso significa por parte del resto de la sociedad ya que
el estado somos todos.
Y el segundo
problema es el centralismo político español, a mi entender el próximo gobierno
debe tomar una actitud como la alemana frente a Europa, es decir que con unas
reglas bien definidas y prácticamente reflejo de las comunitarias, dejar que la
economía se desarrolle entre las comunidades españolas, como cada una pueda o
entienda que debe hacerlo según sus criterios, y esto para un gobierno español
es un sacrilegio político. Los futuros gobernantes españoles, o mucho me equivoco
o querrán repartir equilibrar e igualar todas las españas internas, y si me
apuran tenderán a que desaparezcan para quedar en una sola, eso sí concentrada
en una esplendida y rica capital de España, desde donde se subvencionara al
resto, (quitando a unos y dando a otros) y así me temo que no se arreglara el
paro brutal que nos ahoga, ni se implantaran iniciativas ingeniosas, ni se
crearan nuevas empresas, porque la gente somos así, al que le dan porque para
que esforzarse más, y al que le quitan lo mismo.
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