jueves, 29 de diciembre de 2011

A las personas que me piden que se puede hacer




Ayer el artículo que publique bajo el enunciado LA BANCA SABE QUE LA EURO-ZONA SE COLAPSARA EN 2012, ocasiono un alud de preguntas a mi dirigidas preguntándome y preguntándose, que había que hacer, que acciones habría que tomar al respecto, supongo para evitar lo ya inevitable, mi respuesta es: Que más quisiera yo que saber que hay que hacer, y todavía más importante poder hacerlo.

Según mi criterio el asunto no tiene ya solución, como se dice la suerte está echada, porque el desastre al que nos enfrentamos no es cosa de uno o dos años, lo que ha pasado se viene gestando desde hace más de veinte, tampoco está claro de quien es la culpa, me explico: desde luego hay dos elementos principales en ella “La economía de la globalización de mercados” y “Los políticos ciegos y conformados que la aplaudieron”.

A lo que ahora nos enfrentamos es a un desplazamiento  de las estructuras económico financieras que dominan el mundo, lo que hasta hace 20 años era la base de la riqueza universal y el motor de la economía global, a la que manejaba a su libre albedrio, y que lo componíamos las naciones occidentales básicamente, han sido sobrepasadas y por lo tanto sustituidas, por las economía y sociedades Asiáticas e Islámicas,  además de otros polos no tan reconocibles como grupo social determinado por ejemplo Brasil, India, y Rusia.

El giro es brutal y no nos podemos enfrentar  de ninguna de las maneras con las medidas y normas actuales, piensen que la economía occidental está sostenida por poco más de 1000 millones de seres, que podemos consumir y trabajar. Frente a nosotros tenemos más de 6000 millones de personas que pueden y ya hacen, lo mismo que hacíamos hasta ahora nosotros, con un agravante añadido, y es que las fuentes energéticas (el Petróleo y el Gas) están en su poder, así que la situación es la siguiente: Dominan la energía, Tienen más mercado interno y por lo tanto cautivo que nosotros, del orden de 5 veces más,  así que su fuerza de consumo y trabajo y por lo tanto creación de riqueza (PIB) es inalcanzable por nuestra parte.

La situación es como pueden comprender, irreversible, porque se cometió un error de principio, error posiblemente provocado por el egoísmo y el sentimiento de superioridad de que hicieron gala nuestras estructuras políticas y económicas, cuando empezaron a ver, qué la dependencia de aquel tercer mundo al que dominábamos se esfumaba, básicamente porque tenían la fuente de la energía necesaria para nuestra riqueza, y sus sistemas políticos estaban cambiando. Así que les estábamos alimentando de recursos económicos y empezaban a crecer, entonces en lugar de utilizar esta reacción desde nuestras economías, se prefirió acoplar nuestra economía a sus economías, pensando erróneamente aprovecharnos más todavía de la situación, así pasamos de depender solo de la energía, a depender de casi todo, porque fue lo que hicimos, les entregamos toda nuestra fuerza industrial y tecnológica quedándonos vacios y sin respuesta a su avasallador avance.

Esto es así y no hay nada más que  esperar el final de esta debacle, que no es otro que el igualamiento social general en las cotas que nos impongan los nuevos amos del mundo, salvo que las economías occidentales, se uniesen para dar un salto cualitativo enorme, ya que cuantitativo no nos proporcionaría ventaja alguna, somos demasiado pocos, deberíamos desprendernos de la dependencia energética, deshacer las políticas de globalización comercial, volver a poner todas las trabas posibles al libre comercio, de forma que se comercialice por competencia y no por acuerdos políticos o macro económicos, porque siempre tendremos las de perder. Es una cuestión de pura lógica un automóvil no puede arrastrar por mucho tiempo a un camión de 17 toneladas por muy lujoso y rápido que sea, al final se le quema el motor.

I nada mas puedo decirles yo no soy más que un analista observador al que le gusta intentar entender el porqué de las cosas, y que no quiere dejarse engañar por la demagogia y el interés de camuflar los problemas por parte de los lobbies interesados en mantener las cosas como están, por sus intereses particulares, piensen que lo que les acabo de contar nos afecta a todos, pero a los millones digo bien millones de financieros, inversores, y políticos, que viven a costa de ello todavía más.

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