Más
de 3,5 millones de judíos en todo el mundo, medio millón en Israel, podrían
adquirir la nacionalidad española gracias a su origen sefardí y a la
modificación del Código Civil que el Gobierno español aprobó el viernes 7 de
febrero de 2014 en una acepción que se cumplió hace nada menos que 522 años. "Es
una gran medida y sin duda un reconocimiento a nuestros vínculos históricos con
España 522 años después de la Expulsión", dijo a Efe Asher Moshé, nacido
en Skopje, capital de la actual Macedonia (ex Yugoslavia) y emigrado a Israel
con once años.
El
viernes el Consejo de Ministros de Mariano Rajoy aprobó una modificación del
Código Civil para conceder la nacionalidad española a todos los sefardíes que
lo pidan y acrediten tal condición, que permitirá además que mantengan la de su
país de origen. El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, destacó que de
esta forma la sociedad española culmina la reparación "de lo que sin duda
había sido uno de los errores históricos más importantes", en referencia a
los judíos que fueron expulsados de España en 1492 y que hoy están dispersos
por todo el mundo solo se olvida que se expulsaron cientos y hoy posiblemente
son algunos millones.
Una
lista con cientos de apellidos que acreditan el origen sefardí ha puesto ya a
muchos israelíes en marcha en busca de documentación para obtener la
nacionalidad española, y desde el viernes los principales medios locales
informan y dan asesoramiento jurídico primario a los interesados. Y es que
basta con abrir una guía telefónica local para descubrir que los candidatos son
incontables. Calderón, Zoarez (Suárez), Toledano, Abarbanel, Moreli, Bejarano,
Medina, Baruj o Abecasis son sólo algunos de los ejemplos de sefardíes que hoy
viven en Israel, pero también los hay de aparente origen askenazí como Bloch,
Schlessinger o Sneor.
Que
le pasa por la cabeza a Gallardón y al PP se han vuelto locos, o quieren
volvernos a todos nosotros, que buscan
que quieren que suponen, que ahora los Sefardíes son aquellos judíos ricos que
se dibujan en cuentos o historias de niños, y piensan que si ahora les
proporcionamos la nacionalidad española vendrán corriendo con sus tesoros a
instalarse en su España querida. No creen ustedes que con una verdadera
disculpa y un reconocimiento de lo imbéciles que fueron nuestros antepasados, (que
no se si eran del PP, pero que se parecían mucho) había más que suficiente y no
se haría el ridículo.
La
etnia o la sociedad judía, sefardí o no, es hoy una sociedad una cultura y una religión
totalmente considerada aceptada y reconocida en todo el mundo occidental, no
tienen ningún problema de convivencia más bien muchos tienen a orgullo
presentar esos apellidos, que les sitúan en el camino de la descendencia de una
etnia muy sufrida e incomprendida y porque no decirlo perseguida y masacrada
por ignorantes gobiernos pasados, yo no soy descendiente de sefardíes ni otros judíos
simplemente creo absurdo e incomprensible lo que y porque, al gobierno español
le da por hacer un ridículo tras otro, no tienen bastante con volver con el
aborto al siglo pasado, sino que ahora quieren volver cinco siglos atrás con
los judíos, asombroso.
Hoy
además como España puede ofrecer una vida plena de trabajo y bien estar a los sefardíes,
vivan donde vivan, es todavía más absurdo darles una nacionalidad que nadie ha
pedido, repito era suficiente con pedir disculpas y admitir una actitud absurda
producida por unos ignorantes y temerosos reyes españoles tras expulsar a los árabes
de España. Y llegados a este punto recemos que los árabes viendo esta reacción del
gobierno español no pidan también que les concedamos la nacionalidad española,
porque también los expulsamos y estuvieron aquí durante siete siglos, porque
digo yo que algo dejarían aquí, sobre todo apellidos cultura arte incluso en parte
del idioma castellano.
En
ese sentido, Gallardón recalcó que los sefardíes mantuvieron "no solamente
la lengua sino sobre todo la convicción de que seguían siendo parte de una
España que les había expulsado, y a la que no solamente no guardaron ningún
rencor sino que hicieron que les siguiese acompañando siempre". Así pues la
concesión de la nacionalidad a estos españoles de antaño por medio de una vía
acelerada, y no por "Carta de Naturaleza" o la residencia en España
durante dos años, es a su entender una "deuda histórica", repito por
todas estas condiciones deberíamos dar la nacionalidad a cualquier árabe que
considere que sigue siendo parte de España, o España parte de los árabes, no le parece Sr. Gallardón o es que su posible
racismo no se lo permite.
Si algo tienen los judíos es una visión de negocio inmejorable...
ResponderEliminarYa veo los pequeños negocios de toda la vida convertidos en casas de empeños al estilo USA, sacando el poco dinero a la gente que está en las últimas.