No
hay manera de terminar con este problema típico de la política y los políticos españoles,
quizás es un problema general del carácter español, pero yo creo que en la política
es donde esta mas acusado y hace más daño, podemos decir que en España nadie
hace nada por nada, esto esta mas que sabido, de ahí los innumerables casos de corrupción
tanto de políticos como de financieros y de los que en España se llaman “negociantes”
pero en fin, dejemos esto solo como introducción. El problema de verdad está en la política y en su gestión,
donde todos se deben favores a todos, lo curioso del caso es que muchas veces,
las mas diría yo, se debe un favor por haber hecho lo debido, y con esta acción
correcta, alguien sale favorecido o reafirmado en algo o por algo, pero no sé por
qué razón este último, queda en deuda moral con el otro.
Puedo
entender esta situación en casos no muy limpios, donde la acción de tapadera o
coartada propiciada por un tercero, pueda obligarte a devolver el favor, pero
por el hecho de hacer tu trabajo para alguien que te lo pide de buena fe y lo
haces, no creo que ni uno tenga que hacer juegos malabares para agradecerlo, ni
el otro deba esperar a que lo hagan por agradecimiento debido, pero en la política
española esto es muy común, no quiero ni que ustedes ni yo pensemos mal sobre
esto, no creo que se llegue a plantear el agradecimiento como un pequeño
chantaje, pero en algunos casos lo parece.
En
el actual gobierno del Sr. Rajoy hay un caso de este tipo, durante toda la travesía
del desierto en que el PP y Rajoy han estado en la oposición en España, ha
existido la figura del encargado de criticar la gestión económica del gobierno
del PSOE de tan triste recuerdo, dicha personalidad es ya un político de largo
recorrido casi tanto como el propio Rajoy, me refiero a el ministro de hacienda
Sr. Montoro, bien en la composición del actual gobierno, estaba claro que Europa
pedía la figura de un economista de renombre, más o menos internacional, para
que diese un aire de más confianza en que se daría un buen empujón a las pésimas condiciones de la gestión económica de
España. Era evidente que esta figura no era el Sr Montoro y tanto era así, que
el propio Rajoy escogió a Luis De Guindos profesional del mundo internacional
de las finanzas que según parece, presentaría ese aire de internacionalidad y
confianza para aplicar unas teorías y acciones que no parecieran tan simplemente
españolas.
Pero
aquí entra en juego la teoría de los favores debidos, y el presidente Rajoy no podía
dejar defraudado al hombre que durante ocho años anduvo con él, arrastrándose por
la oposición parlamentaria haciendo lo que debía y supongo le mandaban y
supongo también cobrando por ello como diputado como mínimo, así que cumpliendo
esta norma de honor, el gobierno de España
se inventa una bicefalia en la dirección de la economía, en un lado cara al
exterior coloca al divo internacional como ministro de economía, y en casa casi
escondido al trabajador pero poco brillante Cristóbal Montoro, al frente de un ministerio
de hacienda arrancado del de economía para pagar un favor, ahora los problemas
salen a la luz por pura lógica, porque la realidad dice que un ministro depende
del otro y viceversa, resultado los españoles nos vamos a volver locos para
saber que se va a hacer en la economía española.
El
caso es que ya ha trascendido al resto de europa como era lógico esperar. En la
UE han provocado un fuerte malestar las filtraciones a la prensa sobre la
intención del Gobierno de pedir a la UE más tiempo para cumplir los objetivos
de déficit y las declaraciones contradictorias de los ministros españoles de
Economía y Hacienda. "Así se va al
rescate", ha señalado una fuente europea. Los responsables europeos creen que tampoco genera confianza en los
mercados que el ministro de Economía, Luis de Guindos, no planteara en su
estreno en el Euro grupo la intención de España de pedir una revisión y al día
siguiente lo anunciara en una entrevista.
El
ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, dejó entrever ayer que
el Gobierno y sus socios europeos negociarán con Bruselas los nuevos programas
de reducción del déficit, cuando se conozcan sus nuevas previsiones económicas,
como es habitual cada año, si bien reiteró que "hoy" la intención del
Gobierno es cumplir con el objetivo del 4,4% para 2012. Ese mismo día, el
ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, aseguró
que España cumplirá con el compromiso de estabilidad marcado por la Unión
Europea, al ser preguntado por la posibilidad de que la UE "relaje"
las exigencias sobre el déficit.
Sin
embargo hoy, Montoro cambia y ha
asegurado que ve "claro" que Europa revisará sus previsiones de
crecimiento y modificará los objetivos de déficit planteados porque es
"evidente" que el escenario está "abierto en sentido
negativo". Como ven aquí tenemos dos alternativas una para la prensa y las
reuniones de Bruselas, y otra para el pueblo y la sociedad local, lo peor es
que mientras uno espera ordenes de Bruselas el otro está recortando a diestra y
siniestra y subiendo los impuestos sin esperar a ver si va a servir para algo o
no, es como una carrera para ver quién gana más puntos y por lo tanto más
cuenta de favores por lo que pueda venir.
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