No gustara lo que voy a plasmar en este articulo, pero quiero hacer un
ensayo filosófico sobre el paralelismo de lo que se ha venido a llamar ejes de
decisión, o de poder, o económicos, o lo que quieran añadir. Estos ejes, nacen
en unas condiciones de necesidad cuando en un agrupamiento de cosas en este
caso países o sociedades, la propia dispersión de los núcleos coexistentes
aconseja que se conformen como un sistema planetario y giren alrededor de una fuerza
gravitacional que denominamos eje.
Con ello se pretende que los dos polos que une el eje mantengan
cohesionadas, las fuerzas más pequeñas las cuales se dejan atraer por la fuerza
que el eje impone, así los núcleos más pequeños, se agrupan y se conforma una
gran sinergia que sería imposible de conseguir si cada núcleo fuese en
direcciones y orbitas desiguales y aleatorias.
En Europa hay un eje vertebrador que está claro, y que todos los demás
núcleos aceptan como punto de gravedad, alrededor del que girar seguros de que
su fuerza les mantendrá en la buena orbita, el eje europeo sin duda, es el
formado por las economías de Francia y Alemania, las cuales han tomado la
responsabilidad de guiar a los demás en la necesidad de gestionar uniformemente
la manera de hacer, frente a los problemas comunes de todas las partes que
conforman el universo euro. Y esta
decisión prácticamente se tomo espontáneamente sin necesidad de preacuerdos,
casi diría yo que por la fuerza de la gravedad, en este caso se puede tomar la
definición en sus dos aspectos la atracción y el estado de gravedad inherente
al problema que se trata de resolver.
Expuesta esta teoría europea, quiero poner de manifiesto que en una
escala más pequeña España presenta una similitud parecida en su situación y
problema nacional, en España el mismo problema que se refleja en Europa está
presente, y con más fuerza si cabe, y además aquí en nuestro país también son
17 a solucionarlo, la diferencia con Europa es que en Europa se escucha a
todos, y aquí solo se hace lo que manda y decide uno y esto no es bueno, además
aunque repito no guste a muchos lectores, aquí también se reproduce la realidad
económica y de potencial industrial que se produce en Europa, allí son Alemania
y Francia (Paris Berlín) aquí son, Madrid y Catalunya (Barcelona Madrid).
Pretender negar esta evidencia es o bien de ciegos, o bien de rancio
nacionalismo nacional o regional, porque esta realidad es innegable. España si
de verdad quiere contar en el contexto internacional europeo debe de comprender
esta realidad y usarla, debe formar al frente de la nación el eje Barcelona
Madrid o Madrid Barcelona me da igual, y hacer lo que pueda por reforzar estos
dos polos de atracción económica y potencial industrial y de influencia
internacional, y a través de su potenciación estos arrastraran y aglutinaran al
resto, porque de lo contrario los desequilibrios que se formaran en España se
agudizaran de manera alarmante y producirán sin duda alguna peligros de
desunión tanto afectivas como de desanimo social.
Pretender como seguro que pretende hacer el nuevo gobierno nacional,
corregir los problemas de toda España pensando en una sola España, es ya una
teoría destinada al fracaso. El tristemente sistema, del café para todos, que
es el sistema de equilibrio que prefiere el gobierno central para salvar
precisamente eso su centralismo, es el principal desequilibrador de la economía
española, por una sencilla razón, no es necesario hacer lo mismo en todos los
lugares de la geografía española, lo que se hace o se puede hacer en Cataluña
no tiene porque repetirse en Andalucía y viceversa
Y así podría poner muchos ejemplos, pero baste unos pocos no es
necesario que cada ciudad española tenga un aeropuerto, pero si es necesario
que tengan una buena conexión ferroviaria de velocidad alta, no es necesario que cada puerto de mar de España,
tenga una zona logística anexa para que este vacía porque otros dos o tres la
tengan porque allí si es necesaria, no es necesario poner un parque temático en
cada región de España, si luego esta parte de España no tiene la afluencia
turística ni nacional capaz de llenarlo y hacerlo rentable, y así podría poner
numerosos ejemplos de lo que quiero decir.
Si de verdad queremos ser españoles y sentirnos españoles, no debemos
exigir por chantaje emocional las cosas, si no por lógica económica y social,
solo así nos sentiremos todos españoles, el que España sea cara al exterior
Madrid y Barcelona no quita que un señor de Ciudad Real, por poner un ejemplo, sea
menos, y no es así porque fuera consideran a Madrid y Barcelona España, y si tú
eres español, no les hace falta que seas madrileño o catalán para ellos eres
español, y España puede ser una gran nación y tú sentirte orgulloso de
serlo, o España puede seguir siendo un cumulo de despropósitos sin ton ni son,
que se gasta sus presupuestos en replicar proyectos porque en un sitio van bien
pero que en otros solo sirven para que en dos días queden sin efecto, y encima se
arruinen los dos.
La polaridad real de España, si se potencia y se entiende no es mala,
sino todo lo contrario todas la naciones europeas tienen sus polos de
desarrollo, aquellos que arrastran a los demás, y las cosas funcionan,
Frankfurt y Berlín, Paris y Lion, Roma y Milán, y les aseguro que lo que hay en
Milán no está en Pisa o en Florencia o en Venecia, y lo que hay en Frankfurt no
está en Hanover o en Múnich etc. etc. por favor solo les pido que piensen un
poco en ello, y les digo más, si los españoles no somos más españoles es porque
desde un centralismo absoluto, no nos dejan ser como creamos que queremos ser, según nuestras
circunstancias y peculiaridades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario