La realidad que nos envuelve es realmente preocupante, los acontecimientos
que se suceden nos llevan a la sensación de que se nos está hundiendo el país a
nuestros pies, y es así, no creo que haga falta remarcar de nuevo los
problemas: el desempleo, los recortes de nuestro modo de vida, etc. todos
estamos conscientes de ello. El drama que quiero exponer es que estamos
completamente sin recursos, ni materiales ni mucho menos humanos, para salirnos
de esta situación.
España está abandonada a su suerte, que no es otra que la decadencia más
absoluta, Europa nos ayuda a arreglar nuestra banca porque va en ello la suya
también, pero no puede arreglar nuestro país, ni nuestra política ni a nuestros
políticos, esto queda a nuestra suerte. Y es que no hay a la vista nada que muestre
seriedad, seguridad, y dignidad, en la que apoyar una ayuda o una colaboración
eficaz, como queremos que Alemania acepte los euro bonos, (único producto
financiero que nos permitiría sobreponernos) si está viendo que en seis meses
escasos, no solo no tenemos claro dónde estamos, sino que ya la hemos engañado
tres veces y además tenemos vergüenza de admitir nuestros errores.
Hago referencia a Alemania como ejemplo, pero es que aquí en nuestra
economía, en nuestra sociedad, nos pasa igual. De quien nos tenemos que fiar,
la actuación del gobierno es completamente errática y falsa, nos falseo los
presupuestos nacionales, nos los escatimo y retraso por su conveniencia,
dejando que España cayera al foso del desconcierto durante tres meses más de lo
necesario, entre tanto Europa nos iba perdiendo la confianza, y en España los
bancos perdían la credibilidad y el dinero a espuertas. Recortes, leyes
absurdas y conflictivas que no venían a cuento, regulación laboral que no sirve
de nada.
El gobierno cada día que pasa, está más desbordado por las circunstancias,
y recurre en vez de concretar soluciones, al desconcierto a la mentira
calculada y al terrorismo económico, nos baja los sueldos, nos sube los
impuestos, nos amenaza con intervencionismo fiscal, si no somos conscientes y
honrados en nuestras cuentas, y en nuestros sacrificios, y nosotros pensamos
que si hacen esto, es porque ellos si son honrados y limpios, y saben por dónde
hay que tirar, un mes, dos meses, tres meses, cuatro meses, y al quinto mes
salta todo por los aires y en el sexto ya no nos los creemos por mucho rescate
que quieran vendernos.
Todo lo bien que decían estaba la Banca, todos los acuerdos que se estaban
fraguando para su recapitalización y restructuración, saltan por los aires,
cuando revienta la banca oficiosa, hoy ya nacionalizada, del estado del PP,
Bankia, cae por los suelos toda la credibilidad del equipo económico del
gobierno, del banco de España, y automáticamente desautoriza moralmente a que
este gobierno nos dé lecciones de cómo ahorrar, de cómo apretarnos el cinturón,
de cómo prescindir de nuestros derechos, porque vemos asombrados que sus
trampas y sus desmanes no tienen justificación alguna.
Todavía con el escándalo de la banca en plena efervescencia, vemos como por
enésima vez los números del estado no sirven, nos han vuelto a engañar ya no se
fían ni ellos mismos, de sus propios colaboradores, y por eso hay que recurrir
a auditorías externas estamos en una vorágine de falsedades en todos los
ámbitos de la administración española, y esto se delata en la reunión de
control de los planes de ajustes de las comunidades autónomas, en los números
de la banca en una palabra en todo.
De nuevo se pone de manifiesto que la clase política de España no es honrada,
ni capaz, ni digna, para darme ni ordenes, ni de fastidiarme la vida,
exigiéndome unos sacrificios, que ellos no solo no los van a hacer, sino que
los van a utilizar para seguir inflándose sus bolsillos privados, o los de su
partido.
Y ahora que como afrontamos esto, pregunto a mis lectores y a mí mismo,
esto no puede ser ni seguir así, yo no puedo seguir a un gobierno que me engaña
y que es incapaz, pero lo peor es que no es ni tonto ni
incapaz, es que es un tirano, es un vulgar estafador de feria, que me esconde
la bolita entre los cubiletes día tras día, para que caiga en la trampa de
contribuir con mi esfuerzo a su propio disfrute, me hace pagar de mi trabajo,
para pagar el sus trampas y contratar asesores externos otra vez.
Esto tiene un agravante importante, es que ahora ya son empresas
multinacionales las que se deben de contratar para que digan una verdad
creíble, de lo que es la economía y los bancos españoles. Qué clase de gobierno
es este, que en casi seis meses ha perdido toda credibilidad, la de su pueblo y
la internacional, porque esto que va a hacer de pedir auditorías externas, no
es como nos lo quiere hacer creer por honradez, es porque nadie se fía ya de lo
que dicen ni de lo que presentan, esto es España hoy, una autentica y gran
mentira y esto no lo duden nos arrastra a todos.
Estamos como vulgarmente se dice bien jodidos, nos han destrozado la
economía, la industria, la banca, el empleo, la sanidad, la educación, las
autonomías, los servicios de atención a discapacitados, y por último la
honorabilidad, y somos tan inútiles que nosotros mismos nos los hemos impuesto,
de tal manera, que pueden seguir haciendo los que les dé la gana durante el
tiempo que les dé la gana, si se lo que digo, porque si miran hacia atrás verán
que en realidad, estén unos u otros mandando en el gobierno, los problemas son
los mismos, trampas, inconcreciones, mentiras y sacar provecho propio de la
situación.
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