No puedo dejar de pensar en el escenario que se
nos avecina a los españoles parece que el calor de este julio nos ha afectado a
todos, antes cuando llegaba julio lo normal era que todo entraba en un letargo
suave y estival que producía una serenidad capaz de hacer olvidar todos los
problemas y dejarlos aparcados para septiembre, pero este año no sucede así
parece que en el ambiente hay un elemento excitante que nos pone a todos en la
tesitura de hacer cuantas más cosas mejor antes de que llegue precisamente
septiembre.
Sobre todo esto pasa en el mundo político, desde
cuando recuerdan ustedes ver trabajar a tantos políticos en julio estamos a
finales de mes y no se ve que vaya a haber tregua alguna estamos en continua
efervescencia y lo peor es que no hemos empezado todavía desde ayer se han
disparado todos los ministros del PP la visita del rey a Barcelona de ayer no
ha sentado nada bien su discurso creo que no ha servido más que para levantar más
recelos sobre la legalidad en España.
No había bastante con esto que por la tarde va
la Colau y retransmite en directo la caída del ex rey juan Carlos I del
pedestal del salón de plenos del ayuntamiento de Barcelona, el lio que ha
formado es de época el PP y la derecha española ya no saben a quién hay que
derrocar si a Ada Colau o a Artur Mas, lo mejor para no equivocarse piensan,
seria hacerlo con los dos pero no hay manera no han hecho ninguno de los dos,
nada ilegal haciendo caso a lo que el actual rey Felipe VI había dicho por la mañana
en Barcelona.
Entre tanto las listas para las elecciones Autonómicas…
independentistas y plebiscitarias, que estamos preparando en Catalunya se van
completando y muy acertadamente por cierto, su transversalidad es total y no
solo en sus aspectos político-social sino en la calidad de los componentes
economistas políticos de experiencia internacional cantantes de la transición que
movieron una generación entera, deportistas de fama mundial, líderes de
movimientos sociales, catedráticos de valía contrastada en sus respectivos
campos, en fin un compuesto que sin duda será explosivo por su fuerza de
arrastre de la Catalunya soberanista, porque no es solo política lo que se
ofrece esta vez, es estructura social de país y vaya estructura.
Esto ya es un problema para el PP y el gobierno
que no sabe cómo pararlo porque todo esto está dentro de la legalidad más
exquisita y esto les pone muy nerviosos, porque algo tienen que hacer y este
algo es todo menos parar, pensar y negociar, lo que hay que hacer piensan, es
hundir derrotar y destrozar estas ideas de una nueva forma de hacer política sin
partidos políticos, esto para el PP, el PSOE, no es digerible y ahora desde hoy,
se añade también que ya saben con quien se van a jugar España, yo creo que ya
lo pensaban pero hoy ya lo saben, se la jugaran con Pablo Iglesias y naturalmente
con PODEMOS.
Pero con PODEMOS les pasa igual que con los
catalanes independientes que van y se mezclan y no saben exactamente a quien
hay que denostar y esto nos lleva a unas elecciones donde los partidos clásicos,
los que no han sabido ver por donde las nuevas políticas iban a burlar el
rodillo de la legalidad política de la transición española, se han quedado
solos, los pequeños se añaden a los nuevos movimientos y los clásicos se quedan
solos ante unas elecciones que no van a saber cómo afrontarlas, me refiero
tanto a las catalanas como las posteriores generales. Las primeras en teoría falta
poco para que se lleven a cabo, solo dos meses.
Espero que por lo menos nos dejen descansar uno,
diría que agosto, porque si no esto es agotador, y habrá que tomar fuerzas para
septiembre, dios mío que mes nos espera, primero la campaña electoral y el día
27 elecciones y el 28 puede pasar de todo y cuando digo de todo es literalmente de todo.
En este ambiente se supone que se sabrá ya cuando el presidente Rajoy habrá decidido
jugarse a los votos el gobierno de España.
Así que no habrá tregua, no sé qué pasara en
las elecciones catalanas pero si sé que el PP se va encontrar con que deberá hacer
frente a dos posibilidades que no le gustaran en absoluto, perder Catalunya y
perder España y esto no quiere decir que se haya consumado nada ilegal ni mucho
menos, pero en Catalunya puede que se esté formando un gobierno absolutamente legal,
para gobernar y pensar en la transición. Esperando solamente saber con quién la
deberá de negociar y lo más probable es que no sea con Rajoy y su PP y si esto
es así, que será del PP y del PSOE.
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