No podemos seguir aumentando la degradación social que sufre España ¿pero
cómo hacerlo? esta es la cuestión a la que quiero poner una posible solución.
Ya he mencionado más de una ocasión, que el desempleo en nuestro país es
atípico pero a riesgo de parecer un pesado debo de insistir porque el gobierno
sigue escondiendo la realidad de los problemas y todo empieza precisamente
porque no hay trabajo consecuencia de ello no hay ingresos suficientes para
Hacienda, para la Seguridad Social, para las pensiones para la educación, para
el consumo y como consecuencia se paran las empresas se agotan los recursos se
muere el país.
He pregonado la idea de primar la repatriación de muchos inmigrantes en
paro o no, y lo digo así porque en parte la culpa de haber sido atraídos aquí
por los cantos de sirena de la burbuja de la construcción en la última década, ha
sido de los distintos gobiernos y la ambición de los capitalistas españoles, primar
la vuelta a casa de muchos inmigrados no es echarlos es pedirles disculpas y,
mirar de resarcirlos de nuestro engaño que les alentó unas expectativas que
ahora no podemos cumplir ni para nosotros mismos.
Bien como esto está claro que no lo va a arreglar el gobierno de España,
voy a plantear una socialización del desempleo, con el fin de obtener tres
resultados, reducir el desempleo a cotas del 10%, hacer que el coste de esta
operación recaiga parte sobre el capital privado y no solo público, y lograr
aumentar el consumo con lo que el coste inicial revierta mediante el incremento
de la actividad empresarial al capital privado, consiguiendo que si se cumplen
los esquemas al final recuperen lo invertido.
Vamos a por el planteamiento del tema: en España hay más o menos 3,5
millones de empresas (3.422,232), aquí entran todas, desde la telefónica hasta
el “super” de la esquina de mi calle, bien ante este número uno se le ocurre
que solo que cada empresa emplease a un desempleado, la cifra de los mismos
bajaría a 2 millones lo que significaría que el desempleo quedaría establecido
en el 8%, perfecto un índice a nivel alemán. Por otro lado el gobierno necesita
reducir los costes presupuestarios a toda costa y hasta la fecha ha atacado con
inusitada perversidad al empleado público es decir al funcionario al trabajador
y ahora ya al pensionista a los niños y
a los enfermos pero no es ni suficiente ni justo, hay que buscar otra forma de
reducir gastos.
El gasto del exceso de desempleo es aproximadamente 50 mil millones de
euros anuales, cifra que el gobierno esconde y la reduce a solo 30 mil pero esa
es solo la cifra directa de la lista del paro de ahí cuelgan más subvenciones
ayudas etc., no sé si por inconsciencia o por vergüenza quizás por ambas cosas,
está claro que es aquí donde hay que rebajar y es aquí donde yo opino que
debemos hacerlo entre todos, pero de forma que el sobreesfuerzo sirva para
reactivar el país y no para hundirlo más, empleando dinero y sacrifico a fondo
perdido como pasa con las subvenciones y las medidas del gobierno.
Verán mi idea es que paguemos entre todos, (de hecho ya lo estamos haciendo
pero no funciona) la inserción laboral forzada de 2,5 millones de desempleados,
como hacerlo, de la siguiente manera: el gobierno debería coger el censo
empresarial del país y obligar a que se repartan estos 2,5 millones de
desempleados en la proporción directa de las plantillas activas, contando desde
directivos hasta el puesto más bajo del escalafón, el coste salarial de
absorción de este exceso de mano de obra debería quedar diluido entre el
importe global actual del coste de los salarios, es decir, si una empresa de
100 trabajadores le toca emplear 10 y actualmente sus costes por el capítulo de
retribución al personal es de 2.100.000 euros anuales, (que representa una
retribución media de 21mil euros por empleado y año) este capítulo se debería
mantener igual, lo que supondría que en la nueva proporción, el coste por
empleado o mejor dicho su retribución pasaría a ser de 18,900 euros por año, (en
lugar de los 21,000 anteriores) cantidad que multiplicada ahora por 110
empleados da los mismos 2.100.000 euros de coste salarial anual.
Los demás costes anexos como SS desempleo etc. sufrirían la misma
proporcionalidad con la base de su rebaja proporcional por parte de los
estamentos oficiales. Sería su contribución social para la resolución al
problema de reducción del desempleo y de la reducción de presupuesto nacional. Me
pueden decir ustedes que si no hay trabajo que harían 10 empleados más en la
empresa, no se preocupen de momento si es necesario barrer, siempre hay trabajo
que hacer, hoy se prescinde de él porque representa un coste adicional que la
empresa debe reducir, pero si no hay aumento total de costes o es mínimo no se
preocupen que ya les encontraran algo que hacer.
Hombre me dirán ustedes, pero entonces recae sobre los trabajadores el
coste de esta operación. Bien un poco sí, pero que es mejor que siga recayendo
en forma de impuestos e inseguridad laboral, porque cada vez hay más recesión
porque el desempleo aumenta y el consumo baja, o repartir un poquito de mi
sueldo para que entren en el mercado de consumo 2,5 millones de consumidores
que harán que se reactive el comercio y con ello la producción y la economía y
me asegurarán que se mejoren mis oportunidades de futuro.
Piénsenlo ya hay más de 1.5 millones de desempleados que no cobran nada, y
por lo tanto que viven de la caridad o del subsidio que ya pagamos todos, a
través de nuestros impuestos o retenciones etc. El cambio que propongo, es que
en lugar de que estas personas sean solo una carga social, se conviertan en agentes
activos y gasten, y me ayuden a que mi negocio y mi empresa vaya mejor y se
reactive, y en lugar de volver a bajarme el sueldo el año que viene, me lo
suban, es así de simple, la rueda de la economía funciona así.
Ahora bien para absorber
estas nuevas filosofías, hacen falta gobiernos, patronos y sindicatos, con una
mente muy despierta que sepan planificarlo y explicarlo posiblemente mejor que
yo, ya que disponen de datos, medios y organización para valorar las variables
que la idea requiere, pero lo que si dicen los números es que si repartimos
solo un cinco por ciento del monte de los salarios actuales de todos los
niveles salariales, posiblemente podamos reinsertar casi un 10% de desempleados
de los más complicados de reinsertar, repito aunque sea para hacer de medio
estorbo en un primer momento.
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