Dándole
vueltas a la situación de incompatibilidad nacida entre Catalunya y el gobierno
de España, que no con los españoles cosa que siempre que escribo sobre este
tema intento dejarlo bien claro, hoy me ha saltado a mi cerebrito una idea que
merece la pena, creo yo, plasmarla en un artículo que es lo que estoy haciendo
ahora para que todos la consideremos.
Es
evidente que en la situación actual y con el esquema de nación actual la unidad
de Catalunya en España es muy difícil a no ser que sea como hasta ahora por obligación
o por sumisión, está claro que Catalunya no quiere seguir siendo solo lo que el
gobierno de España quiera y está claro también que el gobierno de España no
quiere perder a Catalunya, no por amor, sino por interés económico esto es así
guste o no.
Ayer
cuando veía al futuro Rey de España entre un presidente del gobierno de España y
un presidente (permítanme la licencia) del gobierno de Catalunya pensé que porque
esto no podía ser la muestra de lo que podría ser el futuro próximo, porque no podemos buscar la forma de convivir
en un espacio común diferentes ideas, formas de ser y visiones de políticas diferentes,
sin que esto suponga la rotura y el enfrentamiento total que es si no lo
remediamos a lo que podemos estar abocados en un par de años a mas tardar.
Entonces
se me ocurrió la idea ya que en su momento escogimos ser un reino porque no nos
miramos en el espejo del Reino Unido de Gran Bretaña. Esta alternativa
podría terminar con el problema de una vez, acondicionando la nomenclatura y
las leyes a la situación de España no la de Gran Bretaña claro está, en este supuesto
el Reino Unido de España podría perfectamente aceptar al estado o principado o
como quieran llamarlo de Catalunya en una situación de independencia política y
administrativa, a la vez que Catalunya podría ser partícipe de tratados de
convivencia política, económica, y de leyes, en el marco de aceptar ser parte constituyente
del Reino Unido de España.
Este es amigos y amigas lectoras de mis artículos la
solución que ayer me asalto mientras veía al Príncipe de Gerona entre dos
presidentes de gobierno mi postura fue la siguiente que diferencia habría si en
vez de ser uno el que manda y hace y deshace sobre lo que el otro representa
fuesen completamente a la par es decir cada uno gobernase y decidiese sobre sus
respectivos electores y territorios, la imagen hubiese sido la misma y el hecho
que los juntaba también porque la realidad es que a ambos presidentes el acto
les convenía y mucho.
Este es el ejemplo que quiero resaltar Catalunya quiere
seguir sus propios pasos a su propia forma de ver las cosas y a su forma de ser
pero esto ni invalida formar parte de una organización llámenle Ibérica, España,
Europa, lo único que no quiere Catalunya es seguir dependiendo sin más, de una imposición
política sobrevenida por hechos de armas y que como consecuencia, y con todo el
relativo derecho que esta situación da, ser lo que el conquistador quiere o te
deje ser, es así de sencillo.
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