Agencia EFE:
La cancillera alemana, Angela Merkel, y el presidente estadounidense, Barack
Obama, se presentaron este domingo como amigos y aliados a pesar de las
"diferencias de opinión" que, recordó la líder germana, puede haber
entre los dos países."A pesar de nuestras diferencias de opinión, Estados
Unidos es nuestro amigo, nuestro aliado, un aliado esencial con el que
cooperamos estrechamente en interés mutuo", subrayó Merkel en un breve
discurso al recibir a Obama en la pequeña localidad alpina de Krün, en
Baviera, antes de comenzar la cumbre del G7.
Alemania
conmemora este año el 25º aniversario de la reunificación del país y Merkel
quiso agradecer la contribución de EEUU, un país con el que apostó por cooperar
"estrechamente" ante la necesidad de dólares que hacían falta para
llevar a término la unificación de las dos alemanias unificación que representa
el coste más grande que estamos soportando todavía hoy todos los europeos
occidentales la unificación obligo a llevar a cabo la UE porque evidentemente
Alemania sola no hubiese podido asimilar las diferencias de economías que
existía en la Alemania oriental versus la occidental.
Si no
hubiese sido necesario hacer esta unión hoy les aseguro que no existiría el
euro ni las deudas soberanas impagables que debemos de asumir los países
mediterráneos claro que no se puede culpar de esto a los alemanes quizás la
culpa de todo la tuvo el derrumbe del comunismo que se vino abajo ante la
imposibilidad de dar a su mundo una posibilidad de mejoría económica no siquiera
parecida a la que disfrutábamos por aquel entonces en los países mediterráneos y
ya no digamos las economías de Francia Holanda Bélgica y naturalmente la propia
Alemania federal.
Hoy tengo la
impresión que ante el fracaso de la economía del euro se está negociando el
tratado de comercio entre los EE.UU.y la Union Europea, yo creo que como
siempre los políticos no hacen las cosas porque si pero si las hacen sin decir
la verdad del porque las hacen hoy está ya comprobado que la Europa del euro no
puede sostener a sus propias economías y como parece un sacrilegio reconocerlo
y desmontar este tinglado imposible ahora se vuelve a mirar hacia los EEUU y se
va a firmar un tratado en que los EEUU van a poder venir a instalar, comprar,
fabricar y hacer lo que quieran con las economías fallidas de la Unión Europea.
Es así de
simple la unión europea se convertirá en otro estado más de los estados unidos
podremos comer sus productos artificiales ellos podrán llevarse los buenos a
sus poderosos consumidores ellos traerán fabricación para mano de obra barata y
compraran las mejores tecnologías europeas para para que no les hagan la
competencia y para que además las fortalezcan, el dólar de igualar con el euro
y juntos intentaremos que Rusia se esté quietecita detrás de su telón de acero
Por eso el
presidente estadounidense repasó los ejes de la reunión del G7 y, en concreto,
su apuesta por "hacer frente a la agresión de Rusia en Ucrania".
En materia económica, recordó, se abordarán las bases de una economía global
que cree puestos de trabajo y el futuro de prosperidad y bienestar de la Unión
Europea, sin olvidar otros capítulos como la cooperación internacional contra
los extremismos violentos o la lucha contra el cambio climático. Obama
reconoció que los retos son difíciles, pero, en el 70 aniversario del final de
la Segunda Guerra Mundial y 25 años después de la reunificación alemana, puso a
Alemania como ejemplo de que es posible realizar grandes avances. (Siempre
pagando los demás).
Obama optó
por el tono distendido y obvió cualquier referencia a las tensiones que han
atravesado las relaciones bilaterales en los últimos meses tras revelarse
detalles sobre los programas de espionaje masivo de EEUU en suelo alemán, donde
llego a ser escuchado uno de los móviles de la canciller alemana. Merkel se
encuentra bajo presión en estos momentos en su país después de que se filtrara
que los servicios secretos de exterior alemanes (BND) habían colaborado con la
Agencia Nacional de Seguridad (NSA) en el espionaje de objetivos europeos,
presumiblemente tanto institucionales como empresariales.
En realidad
no ha habido tal espionaje sino un simple y profundo estudio previo de los
costes y beneficios que los EEUU pueden obtener por salvar otra vez a la vieja
Europa es el cuento de nunca acabar.
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