Hay
cosas difíciles de comprender pero hay una que es más misteriosa y complicada que
el milagro de la santísima trinidad (para los no católicos) “Padre, Hijo y
Espíritu Santo son la misma cosa”. Pero no quiero decir con esto, que los que
estamos padeciendo las tremendas consecuencias de la situación de crisis
galopante y que somos todos los pobres ciudadanos, debamos creer solo por fe,
que lo que pasa es inevitable, todo lo contrario, eso es lo que nos quieren
hacer creer los políticos y economistas mundiales porque no quieren admitir que
no saben cómo terminara el reajuste inevitable del capitalismo mundial.
El
milagro incomprensible es: cómo puede ser que la divisa del país número uno
(todavía con permiso de China) del mundo, que tiene crecimientos positivos
trimestrales del 3% del PIB, esté más
baja que el euro europeo, porque según los mercados y las propias empresas de
calificación todas ellas estadounidenses, las economías europeas están
endeudadas hasta las cejas y cuyo crecimiento trimestral es totalmente
desequilibrado y como mucho no más del 1.8%, y no me vale que digan que es
porque el Dólar tiene intereses del 0 %. El euro está con 0,25% es decir un
raquítico 0,25 % más pero su valor es un 13% más que el Dólar.
Segundo
milagro: como puede ser que el Yuan divisa de la segunda potencia mundial este
no ya más baja que el euro, si no que prácticamente sea innegociable en los
mercados internacionales, cuales son las reglas que rigen hoy en día la
valoración de las divisas porque si han cambiado deberíamos saberlo todos.
Lección
de economía básica para los no iniciados, antes de seguir vamos a repasar el
fundamento de las divisas respecto a su uso y valoración. En la prehistoria, A
finales del Neolítico se comercializaba mediante el intercambio de cosas
físicas, yo tenía excedente de grano y
tú tenías jarras o piedras de sílex y hacíamos un trueque tanto grano por
tantas jarras y piedras, yo tenía para guardar más grano y para trabajar la tierra
y tu tenías comida para tú tribu, fácil y comprensible verdad.
Continuemos
la historia fue avanzando y la humanidad creciendo y ya eso de ir cambiando
cosas era un poco pesado y engorroso porque había que cargar con las cosas y
coincidir con los demás también cargados
hasta los topes se lo imaginan verdad, así que apareció el uso de las
monedas que en principio en algunos
casos eran también cosas e incluso se conoce que animales (cerdos y ovejas por
ejemplo) hasta que derivo en el tipo común de la moneda como la conocemos ahora,
más o menos redonda y con estampaciones
más o menos bien hechas en sus caras planas, básicamente nos situamos en el
imperio romano donde se acuñaban monedas de plata cobre y oro cuyo valor era el
valor intrínseco de su metal tamaño y
peso.
Así
que ya todos hablamos de los mismos conceptos: Moneda, valor, y referente. (Es decir la santísima trinidad
por eso la referencia inicial) cada pueblo a su moneda la nombraba como quería
eso no importaba, la acuñaba con la forma e imagen que le fuese significativa,
pero el valor eso ya era sagrado, se inscribía en su faz y se referenciaba en concordancia con el grado
y peso del ORO, PLATA, BRONCE que eran reconocidos como los valores patrón para
todo el mundo de la época.
Así
que los pueblos podían hacer más o menos monedas dependiendo del oro, plata y/o
bronce que tenían ya fuera por extracción propia o por acumulación de monedas
de otros pueblos obtenidas por comercio expolio y guerras. Claro y sencillo no
podías engañar a nadie o tenías materias valiosas o no eras nadie.
Sobre
la edad media se inventó ya el papel porque ya no era cuestión de ir cargado
con kilos de oro o plata por el mundo y se crearon los bancos y las letras de
cambio (todavía hoy son usadas) y fueron
precursoras del billete o dinero actual estos documentos servían para que un
comerciante entregase su mercancía contra un documento que le decía que fulano
de tal le debía tantas monedas por valor de (X) esto era muy práctico porque
estos documentos se podían hacer efectivos en cualquier lugar que hubiese comercio
y “Bancos” pero lo bueno y sencillo era que seguían siendo verdad es decir se
referían a valor oro y el oro era igual en Roma que en Damasco, o en La India.
La
referencia al valor oro, se mantuvo de diferentes formas y comparaciones a
medida que se iban posicionando más y más países y sus billetes que ya se
denominaron también genéricamente Divisas tenían diferentes valores dependiendo
ya de muchos factores internos, aunque referenciados al oro , primero perdieron
la condición de ser canjeables por el valor en metal de referencia, y
finalmente sobre los años treinta del siglo XX
Ya se complicó todo tanto, que derivo a la creación del mercado de
divisas como lo conocemos hoy, es decir que ya nadie sabe cómo funciona.
Pero
lo que es cierto es que el mundo necesita dar un valor a los papeles, llamados
divisas de los países, pues es la herramienta para comerciar y se han creado
unos factores de valoración, en ellos entran la riqueza propia del país (su
PIB) , sus reservas de oro y otras divisas (fondo monetario) y sobre todo hoy
en día un concepto no tan material, como es la potencia de sus fuerzas armadas
de disuadir a que alguien le diga que su divisa no vale lo que él dice. Y esta
es la situación actual.
A ver quién
tiene valor de decirle a China lo que vale el Yuan, y a los EEUU lo que vale el
Dólar, nadie, hacen lo que quieren, pero que ocurre con Europa que todo bicho
viviente, puede decirnos lo que vale
nuestra divisa y así nos va, porque yo no creo que el Sr. Draghi , la Sra.
Merkel, el Sr Hollande, sean tontos, y no sepan que un conglomerado de naciones
que nos las gobierna en conjunto nadie, que unas están en quiebra, que otras
están sin gobierno de por sí, que todas deben un sinfín de euros, y que muchas
tienen un PIB de risa, tienen garantía suficiente para avalar una divisa que
vale un 13% más que la del primer país
del mundo. Es absurdo e insostenible digan lo que digan estos señores y su BCE.
Lo
peor de esto, es que ponen en juego la convivencia de los habitantes de Europa
porque están obligando al pueblo a pagar sus errores, no señores la deuda no es
mía, yo no debo nada a nadie, y como yo muchísimos trabajadores, comerciantes,
empresarios etc. Son ustedes que no se el porqué, deben miles de millones de
euros y se empeñan cada día en deber más,
y bajan intereses, y venden su
propia deuda cada día más barata, con lo que aumenta más, y a todo eso el mundo
es tonto, y dice que bien, que gran nación Europa, yo quiero comprar muchos
euros, porque me dan garantía. Vamos hombre eso ya no se puede creer.
Hay
que plantarse de una vez, y si se quiere mantener el Euro, cojan la maquinita
emitan billetes por la totalidad de nuestra deuda, y devalúen el euro de
acuerdo con la cantidad de nueva moneda puesta en circulación, y a partir de
aquí empecemos de cero, pongamos el euro más o menos entre 0,8 y 1 dólares, el
precio del dinero al 3% para evitar una inflación galopante, que estoy seguro
no sucedería porque se terminaría la especulación sobre Europa de una vez, y ponerse
a trabajar para a unificar Europa de una vez y si no quieren hacer eso, pues
que cada uno se salga como pueda como en el Titanic.
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