LA ECONOMIA NO TIENE CRISIS, LAS SOCIEDADES OCCIDENTALES SI

La palabra crisis se emplea hoy en día para todo, todo está en crisis que es estar en crisis

Cambio brusco en el curso de una enfermedad, ya sea para mejorarse, ya para agravarse el paciente.

Mutación importante en el desarrollo de otros procesos, ya de orden físico, ya histórico o espiritual.

Situación de un asunto o proceso cuando está en duda la continuación, modificación o cese.

Momento decisivo de un negocio grave y de consecuencias importantes.

Juicio que se hace de algo después de haberlo examinado cuidadosamente.

Escasez, carestía. Situación dificultosa o complicada.

Efectivamente según estas definiciones ejemplares toda la vida y hechos, humanos están en permanente situación de crisis, porque la vida en si es movimiento y cambio permanente. Pero estar en crisis se refiere al ser humano, es él quien esta o padece la crisis, la crisis no está en crisis

Ahora bien otra cosa es adjudicar la crisis a hechos que no la crean por sí mismos porque no tienen vida propia, y así con esa atribución imposible, nos quedamos los responsables de ella como aliviados y desinhibidos de la responsabilidad de haberla provocado. La economía está en crisis es el juicio diario de: políticos, especialistas, y sociedad, y no, la economía no está en crisis, a la economía la hemos puesto en situación crítica, pero ella solita no ha hecho nada, la economía es una ciencia no un ente con vida y pensamientos propios, es como cuando decimos: la Gramática está en crisis porque cada vez se escribe peor, qué culpa tiene la Gramática del uso que el ser humano hace de ella, solo hay una ciencia que no puede estar nunca en crisis que es la matemática, en ella no hay lugar para crisis, siempre es igual por inalterable, dos y dos siempre son cuatro y eso no hay ser humano que lo cambie. 

Pero que bien nos va que ahora podamos echarle la culpa de todos nuestros fracasos a la economía, la ponemos en crisis y ya está todo arreglado.  Que  no sabemos cómo proporcionar empleo, la economía está en crisis. Que no podemos mantener el estado del bienestar, pues también la economía está en crisis. Que no sabemos cómo enderezar las economías nacionales la culpa no es de los gobiernos, la culpa es que la economía está en crisis. Pobre economía ella no está en crisis, ella lo único que hace es reflejar números, valores, estadísticas, y es ella precisamente la que nos dice Humanos estáis en situación crítica.

Pero parece claro que no la hacemos caso y seguimos acusándola de todo, de la mala planificación, del mal gobierno, de los excesos y especulaciones, de la deuda como si fuese la economía la que la hubiese contraído. O no sabemos entenderla, o no queremos que es lo que a mi parece que está pasando. Y si no cambiamos de chip, como se dice ahora, la economía solita no va a arreglar nada, debemos ser nosotros los humanos, los que debemos entender e interpretar que nos está diciendo esta ciencia, por lo demás inexacta, y actuar con nuestro poder supremo, el conocimiento y la capacidad de pensar por nosotros mismos, ese don que solo tenemos los humanos y que parece que ya lo hayamos perdido.

Hay que buscar en la sociedad, que está provocando la crisis económica que padecemos,  lo que nos causa a nosotros estar en crisis, hay que analizar que hemos hecho o estamos haciendo mal, que ha cambiado en nuestro sistema, que ha provocado los desequilibrios que han salido a flote como una ola de Tsunami que nos hace zozobrar. Porque las sociedades occidentales nos hemos endeudado más de la cuenta. Porque en las economías occidentales crece más el desempleo. Porque en las economías occidentales se están imponiendo las políticas conservadoras y de derechas. Porque en las economías occidentales no crece su PIB. Porque en las economías occidentales casi todo lo que consumimos es made in xxxx. Porque en las economías occidentales se ha terminado la creación de riqueza, y al no crearse más las cosas se encarecen los capitales menguan y los intereses se desmadran. Porque la sociedad civil occidental ha perdido la confianza en sus gobernantes y sus políticos.

Si resolvemos todos estos porqués, si somos capaces de reflexionar sobre nuestros  propios hechos y nuestra historia pasada y reciente, quizás podremos acabar con nuestra crisis rápidamente, y si lo hacemos no hará falta echarle la culpa a la economía, que solo hace que denunciar con sus técnicas nuestra estupidez.