En castellano hay una frase que define muy bien
aquellas acciones pusilánimes que no van a ninguna parte que no se pueden tomar
como base para nada porque son falsas o antagónicas, lo que es muy distinto de
ser débiles creo que esta apreciación es muy importante una cosa es hacer una política
ya sea económica o social débil y otra cosa es hacerla falsa con mucha
apariencia pero que si te la crees y te apoyas en ella se derrumba a la primera
de cambio. Todo esto queda definido en la frase Una de cal y otra de arena, que
encabeza el titular de este artículo y que hace referencia a que la cal y la arena
hacen una amalgama inconsistente que no es de fiar y también califica aquellos
hechos que ofrecen una mezcla de cosas buenas y malas.
Hoy las bolsas europeas han salido de estampida porque
el Banco Central Europeo (BCE) acelerará el ritmo de impresión de dinero para
comprar deuda pública en los próximos dos meses, “esta es a mi entender la de
cal” por los últimos vaivenes de los mercados de bonos. Esto como hemos visto
hoy sacudió a los mercados financieros. Anticipando otra inyección de euros en
el mercado, la moneda única se desplomó. La velocidad del reciente repunte en
la rentabilidad de los bonos era preocupante así que el BCE incrementara
"moderadamente" la compra de deuda pública en mayo y junio para no
caer por debajo de su objetivo de compra mensual. Otros banqueros centrales
salieron en apoyo del programa del BCE para comprar 60.000 millones de euros al
mes fundamentalmente de deuda pública, conocido como alivio cuantitativo.
La reacción del mercado, que llevó al euro por debajo
de 1,12 dólares y redujo la rentabilidad de la deuda pública, ilustra lo
crítico que es la impresión de dinero para la confianza. La impresión de dinero
ya está ayudando a impulsar los préstamos bancarios y a elevar la inflación,
aunque ambas siguen en niveles bajos. Los datos publicados hoy muestran que los
precios en la zona euro se mantuvieron planos en términos interanuales en
abril, acabando con cuatro meses de caídas. Los precios al consumo en los 19
países que comparten el euro subieron un 0,2 por ciento intermensual, mientras
que la inflación subyacente que excluye la energía y los alimentos no
procesados, subió un 0,2 por ciento en abril, y un 0,7 por ciento en términos
interanuales.
No obstante, la zona euro, sacudida por una crisis de
deuda y una bancaria, continúa siendo frágil. La confianza entre los analistas
e inversores alemanes del índice ZEW se deterioró mucho más de lo previsto en
mayo, con el telón de fondo de inquietud en los mercados financieros, lo que ha
alterado las expectativas sobre la mayor economía de Europa. Esta mañana se decía
también que habia señales de esperanza de que una de las mayores nubes que se
ciernen sobre el bloque, Grecia, esté a punto de despejarse. El ministro de
Trabajo griego dijo que Atenas pronto alcanzaría un acuerdo con sus acreedores
para desbloquear más préstamos al país al borde de la quiebra.
Pero llego la CAL, los líderes europeos enfriaron rápidamente
las esperanzas griegas de que pronto finalicen las negociaciones para un
acuerdo de ayuda financiera y advirtieron de que las conversaciones deben
apresurarse antes de que el país se quede sin fondos. Un panorama sombrío que
desde Bruselas y Berlín contrastó fuertemente con el optimismo de Atenas, donde
los funcionarios del nuevo Gobierno de izquierda hicieron una serie de
apariciones públicas para prometer que un acuerdo era sólo cuestión de días.
El ministro de Finanzas Yanis Varufakis dijo el lunes
por la noche en un programa de televisión que podría cerrarse el trato en una
semana, mientras que el primer ministro Alexis Tsipras había sostenido
previamente que las discusiones estaban en "la recta final". El
comentario impulsó hoy las acciones griegas casi un 2 por ciento, pero los
responsables de la zona euro dijeron que las conversaciones no avanzaban tan
rápido como se necesitaba para cerrar un acuerdo en tan poco tiempo. "Se
necesita más tiempo y esfuerzo para zanjar las brechas en temas que siguen
abiertos. Consideramos que hay avances pero a un ritmo lento", dijo el
portavoz de la Comisión Europea Margaritis Schinas en rueda de prensa.
La Comisión también negó la información publicada en
un diario griego, que dijo que su líder, Jean-Claude Juncker, había ofrecido una
propuesta de compromiso para romper el estancamiento en las conversaciones, que
fijaron una meta menor de superávit primario para Atenas a cambio de reformas
fiscales y aumentos impositivos. Después de una reunión en Berlín, los líderes
de Alemania y Francia dijeron que las conversaciones entre Grecia y sus
acreedores internacionales debían acelerarse para liberar préstamos adicionales
para Atenas.
"Yo diría que las conversaciones deben
acelerarse, y esperamos que el foro relevante -el Grupo de Bruselas- pueda
avanzar porque el acuerdo de febrero era que se debería establecer un programa
para finales de mayo", dijo la canciller alemana, Angela Merkel, por su
parte el presidente francés, Francois Hollande, coincidió en que las
conversaciones con Grecia deben acelerarse: "Todos tenemos la misma
postura, que es que Grecia debe permanecer en la zona euro". Ambos líderes
se reunirán con Tsipras en una cumbre de la Unión Europea en Riga esta semana,
donde Grecia promueve una serie de encuentros bilaterales para cerrar un
acuerdo antes de quedarse sin fondos.
Después de una pequeña recuperación económica el año
pasado, Grecia ha vuelto a una crisis después que el Gobierno de izquierdas de
Tsipras asumiera el poder en enero con la promesa de que terminaría con los
impopulares programas de austeridad y rescates. Sin acceso a los mercados de
deuda, ni asistencia, el Gobierno se encontró encerrado en difíciles
negociaciones al tiempo que se vacían las arcas estatales.
Se prevé que Atenas a duras penas consiga recursos
para pagar a los empleados públicos y jubilados este mes, pero el desembolso de
1.500 millones de euros al FMI en junio plantea un desafío mucho mayor. La
semana pasada, un pago de unos 750 millones de euros al FMI solo se pudo hacer
vaciando otra cuenta del país en el mismo Fondo. La próxima cita con la situación
de impago es el 5 de junio -cuando vence el próximo pago de Grecia al FMI- como
el próximo punto de inflexión para el país. Pero, el resto del Gobierno griego,
se mostró confiado en que haya un acuerdo de efectivo de reforma "en los
próximos días".
Ya lo ven la UE sigue dando día tras día “UNA DE CAL Y OTRA DE ARENA” y así no se puede construir nada no puede continuar el euro grupo seguir sin
saber que elegir si usar cal o arena tanto para solucionar el problema de la recuperación
de la euro zona como para terminar de una forma definitiva con el problema que
representa Grecia yo sigo pensando en que la euro zona intenta mezclar los dos
materiales la cal y la arena lo bueno y lo malo y esto no pude ser hay que
tomar ya una decisión o los soportes fabricados con cal y arena se vendrán abajo
irremediablemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario