El
gobierno del PP insiste casi cada día que esta reordenando y reestructurando la
banca española, pero eso lo hace para ver si la mentira se convierte en verdad
a fuerza de decirlo, porque lo cierto es que ni lo hace ni lo va a hacer, la
banca no son las comunidades autónomas estas dependen del gobierno, y por el
contrario el gobierno depende de la banca, he aquí la diferencia, así que lo
que va a ocurrir es que la banca se reorganizara cuando le de la real gana, y después
reestructurará al gobierno.
El Gobierno
arranca la venta de Banco de Valencia y Catalunya Caixa. El Fondo de
Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) tiene previsto iniciar formalmente el
jueves el proceso de subasta de las dos entidades. La desinversión del Estado
se ha retrasado más de un mes, respecto al calendario, que se manejaba
inicialmente por, entre otros factores, la falta de recursos del Fondo de
Garantía de Depósitos (FGD) y la dificultad para pactar una solución con el
sector financiero cosa que no ha sucedido hasta que el sector lo ha visto bien.
La banca se
opone a seguir aportando dinero para sufragar el rescate de las entidades
débiles. Y el Gobierno no puede comprometer la consecución de sus objetivos de
déficit público, costeando la reestructuración bancaria. Además, dar dinero
público a la banca también tendría un importante coste en términos de opinión
pública, en un momento en el que se está exigiendo al ciudadano fuertes ajustes
y sacrificios económicos.
BMN
participará activamente en la subasta de Banco de Valencia, intervenido en
noviembre. Su venta se ha visto salpicada por el enfrentamiento que, a raíz de
su rescate, se ha desatado entre Caja Madrid y Bancaja, accionistas indirectos
de la entidad a través de Banco Financiero, la matriz de Bankia. El mercado
también descuenta que entidades como Santander, Popular, Bankinter o grupos de
cajas medianas que deben ganar tamaño analizarán el cuaderno de venta que
distribuirá el banco de inversión Nomura encargado de asesorar la operación.
Con la puesta en marcha de las subastas, el Gobierno y el Banco de España quieren acelerar la reforma financiera, con el objetivo de que el nuevo mapa bancario quede ya bastante despejado antes del verano. La desconfianza de los mercados internacionales hacia España ha vuelto a resurgir en las últimas semanas y es prioritario avanzar en la reestructuración de la banca, una de las tres reformas clave lanzadas hasta ahora por el Gobierno.
La reestructuración
bancaria no avanza porque no puede sostenerse en muchos aspectos, principalmente
el económico, para que nos vamos a engañar el estado no puede acelerarla porque
no dispone ni de credito internacional, ni de dinero efectivo en su banco de España,
para hacer una reestructuración a la americana, así que en definitiva la restructuración
bancaria está en manos de los propios bancos, y esto es muy difícil de completar,
por los mismos motivos.
La llave de
todo este embrollo, la tienen dos elementos básicos y unidos en la desgracia, uno
el propio gobierno central el otro es Bankia. Todo reajuste o reordenación pasa
por limpiar de problemas, más que de deudas, a la banca y Bankia es un problema
con deudas hasta las orejas, así es que ella solita tiene los dos aspectos peores del problema, otras entidades pueden
tener deudas incobrables pero están bien definidas y pueden y de hecho ya han
sido asumidas por grandes entidades, dicho de otro modo, la propia banca se ha
encargado de arreglar algunos problemas
que saben que no les es bueno que estén mareando a los mercados.
Pero Bankia
es un caso irresoluble como tantas otras cosas en España, Bankia es irracional,
se creó contra la lógica mas simple del mundo que aconsejaba su intervención y liquidación
de inmediato, cuando todavía no se había formalizado en su mastodóntica envergadura,
pero esto representaba un peligro político enorme, porque dentro de las
entidades y de las deudas y créditos incobrables aparecerían por todos lados la
comunidad de Madrid y el Gobierno Central y políticos mas o menos corruptos de
una forma u otra , es curioso porque el mal estaba hecho en época socialista,
pero es evidente que una cosa en la oposición política y otra muy distinta el
corporativismo político.
Entre tanta
deuda y tanto despilfarro, había y hay de todo y de todos, así que una forma de
ocultar la verdad fue crear un mastodóntico banco con la esperanza que su
tamaño lo convirtiera en un problema tan grande, que no hubiese más remedio que
arreglarlo como fuese, y allí que pusieron al pobre de Rato, haber si obraba el
milagro de hacer creíble la entidad, en ella se junto y fusiono toda la porquería
que había desperdigada por entidades innombrables, y que había sido capaz de
generara la política y los políticos durante años.
Lo que
encierra Bankia no es cosa de un año ni
de dos, el tiempo como siempre da o quita la razón a las cosas y a las personas,
y en este caso a pesar de los miles de
millones de euros que el BdE ha enterrado en la entidad, (muchos más que los
que el PP quiere ahora ahorrar en la sanidad pública) y el buen hacer de su
director, las cuentas siguen sin salir. Y ya desde luego el gobierno de España y
el BdE ni pueden ni tienen manera de tapar mas el agujero que representa para
la credibilidad de la economía española, esta bomba de relojería llamada
Bankia.
Luis de
Guindos ha reiterado que estas fusiones servirán para reestructurar el sector y
dar lugar a entidades financieras "solventes, con mejor gobierno
corporativo y en disposición de dar crédito" pues, según ha denunciado,
"la banca sigue contrayendo el crédito al sector privado". Pero esto
no sucederá hasta que la banca quede liberada de la “banca oficialista semipública
que representa Bankia en la actualidad” ninguna entidad en su sano juicio va a
querer hacerse cargo de este leviatán, y esto hay que dinamitarlo como sea,
esto es como la maldita deuda de las eléctricas otro momio que nadie sabe muy
bien qué es, y que como paralelismo completo tampoco se arregla.
Yo sé que es
muy duro en las circunstancias actuales decir estas cosas, pero es que no se
gana nada con ocultarlas al final reventarán, y el mal que ocasionarán puede
ser horrible, el gobierno debe ponerse en este asunto, en manos de la banca
española y darles las riendas del problema, no pueden seguir siendo tan ilusos
creyendo que pueden dominarla, la banca es, señores políticos, la economía española,
ustedes son unos muñecos que los cambiamos cada cuatro años, pero la banca
sigue año tras año y a ellos ustedes no los van ni a engañar ni a dominar.
Aprendan de
una vez a negociar, a ser claros y a exponer las verdades, yo creo que si lo
hacen así, es posible que la banca arregle a la banca, si no lo hacen y
pretenden jugar a políticas de camuflaje y salvaguarda de privilegios, a la
banca eso no les hace ni cosquillas, con seguir apretando la soga del credito
tienen la batalla ganada, como les digo el tiempo pone a cada uno en su sitio
no lo duden.
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