Hoy se ha presentado el proyecto de Presupuestos para 2014 que ha elaborado la Generalidad de Cataluña y este presupuesto es muy diferente al elaborado por la Comunidad de Madrid, que ya anunció la mayor rebaja fiscal de la historia a nivel del estado autonómico español. El Gobierno catalán prevé mantener intacto su nivel de gasto público respecto a 2013, y lo apuesta todo a subir impuestos para tratar de reducir el déficit público al 1% de su PIB autonómico el próximo año, los catalanes y/o españoles que vivan en Catalunya serán más pobres pero deberemos de aguantar, hasta que cambien las cosas o perezcamos en el intento.
El consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, ha entregado a la presidenta del Parlamento catalán, Núria de Gispert, el el proyecto de cuentas para el próximo año y también la denominada ley de acompañamiento. Dichas cuentas no contemplan nuevos recortes, pero sí más impuestos, tasas y venta de activos para tratar de elevar los ingresos, porque según el consejero y el gobierno de la Generalitat, se ha llegado al "límite" de los recortes públicos. Pese a todas las presiones e incumplimientos del estado central, el proyecto incrementa, entre otras partidas, las denominadas políticas sociales con el objetivo de combatir la pobreza y la exclusión social, por lo que habrá más recursos para becas comedor, la Renta Mínima de Inserción (RMI), combatir la pobreza infantil y ayudas para familias que vayan a ser desahuciadas.
Además de incrementarse las ayudas para los colectivos en riesgo de exclusión, las cuentas incluyen medidas para ayudar a la reactivación en ámbitos como I+D, innovación, Formación Profesional (FP), empleo y que el Instituto Catalán de Finanzas (ICF) siga facilitando el acceso al crédito. A cambio, y con el objetivo de reducir el déficit, el Gobierno Catalán, aplicará nuevas tasas y subidas de impuestos, entre ellos el de Sucesiones, y también nuevas ventas de activos, que se sumarán a las que se hicieron en 2012, así creará una treintena de tasas y varios impuestos pactados con ERC, además de nuevas subidas fiscales, con los que prevé ingresar más de 1.000 millones extra en 2014, siempre y cuando se cumpla la venta de ciertos activos públicos.
Frente a las bajadas de impuestos anunciadas por comunidades como Madrid, Cataluña sostiene que no puede permitirse rebajar impuestos, y exprimirá al máximo su presión fiscal para evitar recortes en el gasto social. El Gobierno catalán, por ejemplo, ya ha aprobado un aumento del impuesto de transmisiones patrimoniales del 8 al 10 % - el que grava, por ejemplo, la compra de viviendas de segunda mano- y también un impuesto sobre depósitos bancarios, además de recuperar el de Sucesiones, el gobierno catalán prevé gravar la producción de energía nuclear, la emisión de gases contaminantes y crear un nuevo impuesto a las viviendas desocupadas propiedad de sociedades mercantiles.
En definitiva y para no agobiar mas a mis lectores se puede decir que los catalanes tendremos que pagar a España hasta por el aire que respiramos porque esto es así los presupuestos son de Catalunya pero dependen de la bondad del ministerio de hacienda español en cuanto a su liquidada así que el gran problema reside en que si somos capaces de recabar todos los ingresos previstos estos van a Madrid y de allí nos devolverán lo que les parezca oportuno en cantidad y oportunidad.
Además, el consejero de Economía Andreu Mas-Colell, ha recalcado tras la presentación de los presupuestos que si Cataluña imitase el paquete de bajada de impuestos planteado en la Comunidad de Madrid, en todos sus conceptos, supondría una merma de 1.500 millones de euros en ingresos. Porque ha constatado que en la Comunidad de Madrid se pagan menos de mil millones de intereses. Que por supuesto esto no es culpa de la comunidad de Madrid, sino que "El Gobierno Catalán actual se encontró con unos interés que se generan de una deuda muy considerable, y que debe de recurrir al gobierno de España para financiarla.
Estos presupuestos no gustarán a nadie, los primeros a los catalanes que vamos a sufrirlos en nuestro día a día y después al gobierno de España, porque otra vez no ha conseguido que Catalunya claudique y desmonte sus estructuras de estado, sus embajadas, su sanidad, su sistema educativo, su policía, etc., con estos presupuestos posiblemente pasaremos sin muchas cosas, pero con ellos podremos seguir siendo de momento una comunidad lo mas autónoma posible, a la espera de que se pueda por la fuerza de los hechos y la razón ir más lejos y llegar a ser una nación soberana. Es más yo diría a mis conciudadanos que estos presupuestos junto con otras cosas nos ayudan a ver que así no se puede continuar.
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