domingo, 5 de febrero de 2012

LA CALMA QUE PRECEDE A LAS GRANDES TORMENTAS


Esta mañana y todavía ahora no se sobre que escribir en concreto, estoy desanimado no encuentro de que hablar, porque me estoy dando cuenta de que la sociedad prefiere no querer hablar de nada importante, hoy solo se repasan cosas viejas temas ya intrascendentes, cosas ya sabidas y repetitivas, que si quiebra Grecia, que si Siria se mata entre sí, que si Rusia no sabe encontrarse a sí misma, que si china es mas capitalista que nadie, que la ONU no sirve de nada, que Irán puede provocar una recesión brutal cortando el suministro de petróleo, que Europa no tira ni hacia adelante ni hacia atrás, que España ni siquiera va a ningún lado, que si los socialistas españoles son masoquistas y se apuntan al pasado perdedor, que rebrota la inquietud y los tambores de guerra en las Malvinas, etc.

Parece bastante donde escoger, para escribir sobre algo de todo esto, pero yo no lo veo así, todo esto son como enunciados de artículos de prensa o de posibles guiones de historias, que están ahí detenidas en el tiempo en espera de su continuidad, y se repiten y se vuelven a repetir sin que nadie haga algo por cambiar la situación. Porque sucede así, y este es mi tema de hoy.

Porque llega este  momento  en que me es imposible escribir sobre algo, de lo que no haya escrito ya, y sobre que con más o menos acierto, haya dado mi opinión, mi juicio, una posible salida, porque no tengo ningún motivo que signifique un cambio sobre el que escribir y comentar,  algo en lo que uno creyese que es importante para la sociedad de la que se forma parte, y que indicase que algo se mueve por fin.

Que es lo que nos atenaza cada vez más, porque la sociedad sea la que sea, no es capaz ya de sobreponerse y actuar ante las incongruencias políticas y las encrucijadas económicas que nos van arrinconando, arruinando, y sustrayéndonos de los avances que hemos ido conquistando a través de cientos de años. Hoy hablamos de futbol, del congreso del PSOE, del frio tremendo que nos invade, y un poco de todo de lo que he expuesto en el párrafo anterior, y me imagino que el que sabe rezar esta callado rezando, y el que no, suplica al destino o a quien sea, que las cosas no vayan a mayores. Yo diría que empezamos a dar por bueno, o como mal menor, los desastres que nos están acosando, porque ciertamente todo se pueden empeorar y mucho.

Y este temor, que nos coarta sobremanera a todos y sobre todo a la clase política  y gobernante del mundo, nos convierte en títeres y bufones de los acontecimientos  y estos nos manejan libremente mientras ellos se desenvuelven en  idas y venidas sin tomar ningún rumbo fijo, a la espera de algo o alguien los reconduzca. Tendremos que esperar al lunes digo yo, haber si se encara la semana con más decisión, cosa que dudo, porque está claro que todos los implicados esperan que las cosas se desarrollen por su propio destino, es evidente que la gobernabilidad del mundo y por ende se la sociedad está fuera de control, porque ya no es eficaz, ya no tiene argumentos validos para corregir las situaciones anómalas en que nos vemos envueltos, luego la pregunta es, para qué sirve la política o dicho de otro modo para qué sirven los gobiernos, que se supone nos deberían de gobernar dirigiéndonos hacia una mayor estabilidad y seguridad social.

Si esto no lo reclamamos, no nos lo van a dar por propia iniciativa, esto está claro porque si fuese así, no hubiésemos llegado a estos extremos, y yo no estaría escribiendo esta llamada de atención, escribiría de el plan tal, de las nuevas iniciativas de cual, de la mejora de esto, de la ampliación de aquello, en fin de lo bien que nos gobiernan y de lo extraordinarios que son nuestros dirigentes, como he dicho en algún que otro artículo, cuando llego a este punto es cuando me doy cuenta y exclamo hay que renovar la Democracia, porque es un sistema que esta sobrepasado por la evolución de la sociedad del mundo, de la economía mundial, y de la demografía mundial, claro que para esto harían falta auténticos líderes públicos y políticos, que se atreviesen a reestructurar el mejor pero a su vez el más viejo de los sistemas políticos “La Democracia” del pueblo para el pueblo. Debo estar soñando para pedir tamaña aventura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario