Voy a volver a repasar la historia de España y lo voy a hacer porque aunque
la he repetido muchas veces parece que los españoles no se la creen o peor todavía,
les importa poco, porque ya están acostumbrados o porque en el fondo les gusta
tener una excusa a mano para no hacer nada por ellos mismos para solucionar los
problemas de su historia, es mucho mas cómodo vivir echándole la culpa de todo
al estado o al destino, que admitir la displicencia de uno mismo y por ultimo lo
voy a repetir porque ya no soy yo solo quien analiza la realidad nacional.
Hoy leo un artículo en “El Economista” que se titula “España un país de
extremos económicos” en que se empieza detallando que España es el país de la
OCDE donde más han crecido las diferencias sociales durante la crisis.
Instituciones y organizaciones sociales ponen el grito en el cielo ante una
realidad que puede generar conflictos. Pero esto no es nuevo esto puede
asombrar a los miembros de OCDE pero España es así desde el siglo XV es decir
desde du fundación como reino de España, solo hay que haber o leer las grandes
obras literarias españolas y verán reflejado el sistema de sociedad que crearon
y mantuvieron los reyes y gobernantes que desde entonces han conformado a la
sociedad española con estas grandes desigualdades que hoy asombran a la OCDE y al
mundo occidental
Un artículo publicado por “La Vanguardia “aglutina las voces que alertan del grave problema de aumento
galopante de la desigualdad que se da en España. La OCDE y el FMI lo
constatan, al igual que lo han hecho ONG's como Save the Children, Cáritas,
Intermon Oxfam o Human Rights. En el punto de mira, los distintos gobiernos que
han dirigido al país desde 2007 y que junto con las políticas de austeridad
auspiciadas por Bruselas no habrían hecho más que permitir que el mayor esfuerzo económico exigido para
afrontar la crisis haya recaído en quienes tenían menos recursos.
Los datos asustan. Según la
OCDE, España ocupa el primer lugar en el ranking de crecimiento en desigualdad
social durante la crisis. Entre 2008 y 2012 los ingresos de los
hogares españoles cayeron 2.600 euros por persona, "una de las caídas más
fuertes entre los países de la eurozona". Además, sólo un 54% de adultos
en edad de trabajar tiene empleo, la tercera tasa de ocupación más baja de los
34 países de la OCDE, habiéndose incrementado el paro en 13.000 personas a la
semana entre 2007 y 2013. Según la EPA, en la actualidad, el 36% de hogares
españoles tiene a todos sus miembros parados.
También la OCDE estima que el 10% de los españoles más pobres habrían
perdido un tercio de sus ingresos desde 2007, mientras que el 10% de los
españoles más ricos sólo habrían visto bajar sus ganancias un 1%. Abundando en
este sentido, la ONG Intermón Oxfam afirma que "las 20 personas más ricas
de España poseen una fortuna similar a los ingresos del 20% de la población más
pobre".
Por otra parte, Save the Children apunta que "España ha fracasado a la
hora de sacar de la pobreza a casi tres millones de niños que la sufren en el
país y lo colocan en la cola de Europa, sólo por delante de Grecia".
Según La Vanguardia, el
Gobierno está preocupado por esta desigualdad creciente y tiene miedo de que
derive en un problema social serio cuando la economía empiece a
repuntar, las voces que hablen de mejora de la situación se multipliquen y, sin
embargo, una amplia base de la sociedad no perciba lo mismo en su día a día. Y es
que esto va ha ser así posiblemente los de la OCDE no lo puedan entender pero España
es un país occidental que se rige casi por parámetros sociales en vigor en los países
árabes, unos pocos viven bien y la mayoría pasa como puede, pero esto no es de
ahora es que alguien ha olvidado que casi toda la península ibérica fue durante
7 siglos árabe.
Si miramos el mapa español de desigualdad más pronunciada en todos los aspectos
sociales, veremos como coincide
plenamente en los lugares donde más tiempo estuvieron bajo el dominio de los árabes,
es decir todo el centro y sur ibérico, y esta situación porque perdura siglo
tras siglo, se preguntaran ustedes, porque ya han pasado otros 7 siglos desde
entonces y no se ha arreglado nada, siguen los mismos desequilibrios
fundamentales aunque modificados a las normas de vida moderna.
La cuestión es puramente política es de sistema de organización de estado,
mi opinión es la siguiente. España es fruto de la reconquista de un territorio ibérico
que había sido invadido y conquistado por los árabes a una amalgama de reinos
medievales visigodos, el factor quizás más importante para la
caída visigoda fue la grave crisis demográfica del reino, que en los últimos
veinticinco años había perdido más de un tercio de su población. Esto fue
debido a las epidemias de peste y los años de sequía y hambre de finales del siglo
VII.
La
conquista o el asentamiento árabe fue especial porque se planteo una especie de
convivencia entre los reinos o asentamientos visigodos y judíos que estaban establecimos
en la península, y los nuevos conquistadores que no fueron por decirlo de algina manera ocupantes, es decir no se
implantaron en sus nuevos territorios, en realidad creo yo que fue porque
fueron siempre pocos en número, los musulmanes venidos a simplemente guerrear o
conquistar, pero no a ocupar, con todo la cultura que aportaron realmente hizo
mella en la península, no olvidemos que estuvieron aquí siete siglos.
Pero
a lo que me refiero es que no llegaron a crear una fuerte cultura social los
jefes árabes, acompañados de mercenarios bereberes, no traían ninguna
civilización nueva, puesto que el islam (exceptuando el idioma árabe y la
religión, que sí vienen originalmente de Arabia) no existía todavía asi que
convivieron con muchos judíos cristianos y también con estructuras de gobierno inconcretas, califatos, reinos cristianos, condados,
etc. de hecho desde la misma invasión árabe empezó la “reconquista” .
El
término es históricamente inexacto, pues los reinos cristianos que
«reconquistaron» el territorio peninsular se constituyeron con posterioridad a
la invasión islámica, a pesar de los intentos de algunas de estas monarquías
por presentarse como herederas directas del antiguo reino visigodo. Se trataría
más bien de un afán de legitimación política de estos reinos, que de hecho
se consideraban reales herederos
y descendientes de los visigodos, y también
el intento de los reinos cristianos (especialmente Castilla) de justificar sus
conquistas, al considerarse herederos de sangre de los godos.
Sea
como fuese, la reconquista fue un ir y venir de acciones guerreras muchas
inconexas que llevaron a cabo distintos reinos ibéricos, finalmente podemos
decir que la finalizan los reinos de Catilla y Aragón quienes deciden fundar un
solo reino y ahí se inicia diríamos en el 1942 el camino de la España moderna,
pero por una razón u otra el predominio del reino de España se sitúa siempre en
el centro de la península, allí se establece la corte real y el poder, Valladolid,
Toledo, y finalmente Madrid sentaron realeza.
Y
a la vez que se asentaba el poder, la corte central se alejaba de la periferia y
los desequilibrios vienen desde entonces no es un cuento histórico es una
realidad histórica, España no sabe o no quiere o no puede equilibrase, es un
defecto quizás inexplicable pero es real y que si profundizamos mas todavía, podríamos
ver que existe casi una dualidad que se encuentra en Madrid y Barcelona, la primera capital del reino de
castilla, y la segunda capital del reino de Aragón desde la unión matrimonial
de Ramón Berenguer IV y Petronila, fue también la ciudad donde habitualmente se
encontraba el rey de Aragón y donde se centralizó el Archivo de la Corona de Aragón.
En
definitiva desde estos dos polos se concentra el poder la economía la política y
desde ellos ocurre un hecho común la concentración, en lugar de expandir parece
que absorben todo hacia ellos como si de dos agujeros negros se tratara, es
evidente una diferencia fundamental entre ambos cual es el territorio de
influencia, así Barcelona se circunscribe en un territorio mucho mas pequeño lo
que le permite equilibrarlo muchísimo mejor, así hoy Catalunya está en su
totalidad mejor equilibrada que España, a la que Madrid ni ha sabido ni creo
que pueda por recursos y por costumbre reconstruir una España en la que las
diferencias sociales y económicas no llamen la atención a la OCDE y al mundo en
general.
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