lunes, 7 de noviembre de 2011

EN LA SITUACION ACTUAL ¿MERECE LA PENA COMPROMETER MAS RECURSOS?



Me estoy planteando hoy a la vista de los desastrosos resultados de la economía europea, si realmente vale la pena seguir invirtiendo y comprometiendo más recursos económicos para apuntalar un derrumbe que ya ha sucedido, me parece una solemne perdida de esfuerzos económicos, seguir impulsando fondos de garantías, rescates y quitas  de deudas, no se pero me parece que ya no queda nada por apuntalar ni rescatar.

Los importes empleados y perdidos por la economía europea en general, para tratar de evitar lo que ha resultado inevitable, han proporcionado el efecto contrario al propósito para el que se destinaron, no solo no han mermado las deudas soberanas ni han aportado tranquilidad a los mercados, si no que lo han empeorado todo, estamos más endeudados, estamos más inquietos, estamos siendo más atacados, y si no paramos acabaremos completamente arruinados.

Dadas las cifras actuales es absurdo rescatar nada, porque díganme ustedes que vamos a rescatar, unas deudas impagables de Grecia, de Portugal, de España y de Italia, sus economías completamente hundidas y destrozadas,  no podemos hacerlo sin correr el riesgo de que esto signifique el estancamiento o la recesión de la economía europea al completo, para más de diez años, hemos tardado demasiado en solucionar lo que en principio hace un par de años, solo era cuestión de 300.000 millones de euros y que hoy no se cubre por menos de un billón de euros.

Y no solo es la cantidad de recursos  que quedarian estancados en unos fondos de  garantías, es que no servirán para acabar con el problema, porque el camino abierto a los mercados es una espiral de chantajes uno tras otro, sin embargo estos recursos, empleados en el mercado interno europeo en paliar los déficits de las economías nacionales, y en recapitalizar bancos e industrias y el consumo, darían la vuelta al problema y la recuperación podría ser un hecho, con lo que entonces sí que  las cosas volverían a su cauce del que nunca debieron salir.

Para que vamos a defender o garantizar a los mercados la realidad europea de hoy, miremos las cifras y la situación en que estamos, las pérdidas de las economías nacionales europeas este año, están rondando el 35% a día de hoy, la situación político-económica esta fuera de la consideración de los mercados, analicemos los resultados del pasado G20, los mercados allí asistentes nos dejaron de lado de la manera más denigrante y clara que jamás se había tratado a ninguno de ellos, luego que esperamos hacer, poner encima de todo lo perdido, (y que como dicen los cálculos lo que hemos perdido ellos lo han ganado) el resto que nos quede, creo que esto sería de estúpidos.

Ya sé que políticamente lo que voy a decir es un sacrilegio a oídos de la comisión europea, pero es lo que yo haría. En estos momentos en que toda la economía euro  está sin valor en el mercado internacional, en que la triple A va a ser rebajada a Francia, y solo va a quedar a Alemania hasta que los ataques financieros que no se detendrán, se vuelquen sobre ella, hasta hundirla también, deberíamos decir basta y declararnos abiertamente en una especie de rebeldía financiera y actuar exclusivamente para realizar acciones internas que nos lleven a la recuperación económica y no a la sangría financiera y bloqueo de la productividad de la zona euro.

Ya lo he especificado en otro artículo, devaluemos el Euro por lo menos un 15% a base de proporcionar liquidez al mercado interno, es decir más euros en la corriente crediticia y al consumo, rebajar el precio del dinero al 1% y controlar la inflación hasta un máximo de punta del 6%. Con esto la recuperación de la economía de la euro zona se conseguiría en unos 3 ó 4 años, a partir de los cuales, la situación frente a los mercados internacionales se corregiría, no ya por nosotros solamente, sino por ellos porque un mercado en marcha de 350 millones de habitantes o de 520 millones  si se ampliase a los 27 miembros de la Unión Europea es muy goloso.

Los beneficios que hemos regalado a los especuladores internacionales durante la mala gestión que hemos llevado a cabo durante estos dos últimos años, a mi entender nos dan la fuerza moral para decir basta, cerrar como vulgarmente se dice la caja, y dedicarnos a trabajar y ahorrar para nosotros y nuestras maltrechas economías, y si salimos de esta, les aseguro que los G20, volverán a llamarnos muy contentos,  piensen que los beneficios que el mundo financiero a obtenido, gracias a las deudas y la mala gestión de nuestra economía, es muy superior que la perdida contable que representaría la reestructuración de la deuda global y la recuperación de la economía de  la zona euro. Dicho de otro modo no hay que sentirse culpables nos han robado nuestra riqueza, así que ahora creo que tenemos todo el derecho de devolverles la jugada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario