Hoy tal parece que se está a punto de desencadenar la
segunda gran depresión mundial, o no, la solución pende de dos finísimos hilos, uno Italia el
otro el euro. El tiempo se agota y no sé si dará tiempo a rectificar, o ya la
bola ha empezado a rodar pendiente abajo camino de la segunda recesión de la
historia mundial, (la primera se inicio un lunes 29 de octubre de 1929) y la
segunda si no se evita empezara el lunes 14 de noviembre de 2011.
Hay como he dicho antes dos hilos muy finos, que
retienen la bola de la represión aguantándola para que no se precipite, uno de
ellos no depende de la unión europea el que se rompa, este hilo es Italia. Este
país está completamente fuera de control racional bajo el chantaje de un Maquiavelo,
viejo, sin escrúpulos, que por lo que le queda de vida le da igual que pasa con el mundo, con su nación,
y con su responsabilidad como ser humano. Este gobernante ha imbuido a toda la
clase política italiana de no se sabe bien que culpas, y que miedos, que la
atenazan incomprensiblemente, y les coarta para actuar con dignidad y sentido
de la valentía y la responsabilidad frente a ellos mismos y frente a terceros.
Italia no decidirá, no puede decidir no sé porque, escapar de su captor y tomar
el camino de la libertad de acción, que todo gobierno necesita. La unión europea
debe contar con ello, me temo que será necesaria la fuerza, para liberar el
congreso italiano de sus ataduras.
Esta situación es importante ponerla de manifiesto,
porque es la excusa que puede romper el segundo hilo que sujeta la bola de la depresión,
el Euro. Italia es sin dudar a dudas la gran bofetada al europeísmo si es que
ha existido alguna vez, Italia está dando la razón a quienes quieren usar el
argumento de que hay una Europa seria y trabajadora en el Norte, y una Europa desconsiderada,
vaga y sobre todo falsa, en el Sur. Posiblemente haya mucho de razón en esta aseveración,
pero aun reconociéndolo, no deja de ser Europa también el Sur. No obstante esta
defensa del Sur no es suficiente para convencer al resto de europa, para que no
tome la decisión de construir a Europa en dos: la Europa del norte y la Europa
del sur esto no funcionaria jamás.
La excusa para construir esta división, es el evitar el
fracaso del Euro por parte de los países que se consideran a sí mismos avaladores
de esta divisa, pero esto no es así, los mercados no dejarían caer al 40% del
mercado y la riqueza potencial de la unión europea, sin cobrarse la perdida que
representaría a sus economías. En el momento que se intuyera que la europa “rica”
se quedaba con el euro, y dejaba a su libre suerte a la europa “pobre” todos los mercados europeos e internacionales,
reclamarían a los poseedores del euro la deuda que hay contraída en Euros, no lo olviden, nadie querría
cobrar en Liras, Dracmas, Pesetas o Escudos. Una solución sería pagar la deuda
los mantenedores de la divisa y partir de nuevo apuntándose las perdidas a su
nueva economía, al fin y al cabo parece que es el mismo camino a seguir tanto
si se separan como no pero no es así ni mucho menos.
Estamos hablando de una quiebra de unos tres billones
de Euros, acompañada además de la pérdida de un mercado de 115 millones de
personas, que rápidamente sería objeto de deseo de China, Asia, y la economía BRIC,
para usarlo como plataforma logística y mano de obra barata, para efectuar el
asalto final a la rica Europa del Norte. Esta realidad estratégica, no es
soportable en absoluto por la Europa del Norte, ocurriría además el abandono de
la europa rica por parte de los posibles aliados actuales, el mercado anglosajón,
cuya misión más perentoria es hacer cortafuegos a la expansión de los agresivos
BRIC capitaneados por China.
Esto sucedería en un abrir y cerrar de ojos, su efecto
sería el mismo que se produjo en 1929 caidas de las bolsas de todo el mundo
occidental, ocho años de luchas internas entre mercados y sobre el 2020 el
desenlace final, que pueden ser dos, el fin de la economía occidental,
sustituida por la nueva economía euroasiática, o la tercera guerra mundial,
como último recurso del mundo occidental capitalista, frente a las fuerzas
invasoras que aunque solo sea por cantidad seguro que ganarían.
No hay que darle más vueltas, estas son las
alternativas a día de hoy, excepto que los alemanes y franceses dejen de soñar evalúen
bien sus fuerzas y su destino, y reconozcan que la única salida que nos deja
Italia, es la contraria, unirnos todas la naciones y economías de la Unión Europea,
prescindir de nacionalismos implantar el Estado Europeo, unificar la economía, unificar
la deuda, y absorberla entre todos, dar a los mercados la lección de unidad que
nos situaría en condiciones de salir reforzados de este mal sueño y sobre todo
eso si, no volver a caer en la fantasía de que todo el mundo es bueno, y puede
convivir por separado y juntos a la vez, o una cosa u otra.
Y todo esto podría pasar, por la tozudez de algunos de
no querer afrontar la realidad de asumir la garantía de pago, de unas deudas
desperdigadas juntándolas en una sola deuda europea, que no superaría los siete
billones de Euros, esta deuda representaría un porcentaje del 60% del PIB de la
Unión Europea, o del 70% referido solo a la euro zona, con estos parámetros, la
deuda europea estaría calificada de triple A con toda seguridad, francamente no
puedo entender como existen dudas en nuestros gobernantes, salvo lo de siempre,
la endemoniada ambición del poder absoluto.
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