miércoles, 30 de noviembre de 2011

EN LA UNION EUROPEA, NADIE QUIERE HACER NI SALIR EN LA FOTOGRAFIA



Si todavía se mantiene el euro, es sencillamente porque nadie ningún político, gobierno, nación etc. quiere ni hacer la fotografía del entierro de la falsa moneda, ni tampoco quiere salir en el sequito de dicho entierro, así que todo está en el aire esperando lo natural que es la muerte por inanición colectiva de la Unión Europea. No le queda otra salida a la unión que el suicidio, su ineficacia ante la primera gran crisis que la ha alcanzado, deja bien a las claras que el proyecto no tiene futuro ni político ni económico, en parte por culpa de su ceguera en pensar que los hechos serian más fuertes, que las diferencias nacionales políticas y económicas, en el momento que las cuentas han girado a peor, todos los componentes de la Unión han huido de responsabilidades y se han posicionado en el limbo institucional. 

BRUSELAS (Reuters) - Europa se enfrenta a 10 días cruciales para salvar la zona euro después de acceder a incrementar su fondo de rescate y reconocer que podría tener que acudir al Fondo Monetario Internacional para obtener más ayuda para evitar un desastre financiero. "Estamos ahora entrando en un período crítico de 10 días para completar y concretar la respuesta de la Unión Europea a la crisis", dijo el miércoles el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, mientras los ministros de Finanzas se reunían.

Los ministros de la zona euro se pusieron el martes por la noche de acuerdo sobre los planes detallados para reforzar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), pero no pudieron decir en qué medida debido al rápido deterioro de las condiciones del mercado, lo que les llevó a mirar hacia el FMI. Como se puede decir que los ministros se pusieron de acuerdo, que acuerdo es ese, que no puedes cumplir, dicho de otro modo que no depende de ti, esto no es un acuerdo, es un sueño, es una fantasía esotérica, manifestada por todos los reunidos con la ingenua idea de que una mentira muy repetida se convierte finalmente en una falsa verdad

Los rendimientos de los bonos italianos y españoles como era de esperar  volvieron a subir hacia niveles insostenibles el miércoles, mientras los mercados consideraban que el refuerzo del fondo de rescate era insuficiente. Por no llamarlo directamente falso, que es un término muy duro para los sensibles oídos de los ministros impotentes ya y totalmente faltos de decisión y poder. No habrá (FEEF) no puede haberlo es una tremenda ilusión, como pretendían los gobiernos europeos que los países emergentes y el FMI, fueran tan ilusos que invirtieran en un fondo que iba a servir para abalar la misma deuda que ya tienen, y que no van a cobrar nunca, que les estaban planteando los ministros de economía europeos, sencillamente el timo de la inversión piramidal.

No lo comprendo sencillamente no puedo entenderlo, a no ser que como ya he dicho otras veces la idea final es terminar con el escenario europeo, que en el sueño de una noche de verano se imaginaron  Konrad Adenauer y Robert Shuman, estoy seguro que si estos personajes estuvieran al frente de su sueño, la solución a los problemas sería muy fácil, lo que no significa que sea ni sencilla ni agradable, pero si les aseguro que sería definitiva y fiable.

La Unión Europea, tiene dos salidas una: Retirar el euro y volver a la situación unilateral de una nación una divisa, y que cada uno se las componga con su estatus económico manteniéndose la Unión Europea anterior al tratado de Maastricht , dejar que se estabilicen de nuevo las condiciones individuales de los países, hasta poder configurar de nuevo una unión real política y monetaria, ya la experiencia nos ha enseñado que no pueden ir ambas unificaciones por separado.

Y dos: aceptar sin miramientos la teoría de los hechos por delante de las consideraciones y provocar la unión por la fuerza, y me refiero a la fuerza de la economía común, para ello no queda más remedio que unir la zona euro, con las mismas formas reglas y leyes: presupuestarias, financieras, fiscales, impositivas y laborales (no me refiero a cuantía de salarios si no a funcionamiento y orden laboral) reunir toda la deuda soberana de los países, que sean propuestos por mayoría a formar parte de esta unidad y que acepten esta sumisión de sus poderes nacionales, creando una nueva entidad, (si no se quiere usar para ello el BCE) que perfectamente podría denominarse Fondo Monetario Europeo, en donde se contabilizaría la entrada de las diferentes deudas en euros actuales por separado, y en las condiciones de coste y solvencia en que el mercado internacional las ha situado. Con el fin de que cada deuda fuese restituida por cada deudor como si al mercado internacional se tratase.

Al FME se le debería de dotar de un capital preferentemente nuevo de por lo menos 2 billones de euros, con lo que dicha organización y con este fondo de garantía iniciaría la labor de único negociador de la deuda europea a partir de entonces. Los países miembros del euro que hayan accedido a esta situación deberán pasar sus necesidades de financiación a este estamento, el cual realizara la subasta de deudas, bonos letras del tesoro etc. en los mercados financieros como subasta de deuda europea, la deuda vieja por así decirlo, permanecerá perfectamente controlada y contabilizada a fin de que cada deuda sea amortizada de forma y coste diferente, al  que será único y común a partir de la nueva organización.

Es evidente que este sistema no evitara las dificultades de recortes y sacrificios de los países que en este momento tienen dificultades, puesto que deberán hacer frente a las deudas, por así decirlo, empeñadas en el FME aparte de las nuevas deudas ya unificadas, y es que no se puede intentar la unificación económica y fiscal, si los componentes tienen dos economías separadas físicamente, es decir una nueva deuda en el FME, y otra en otro contexto completamente ajeno, por donde pudieran recibir ataques violentísimos, que desestabilizarían otra vez la nueva economía común, pero es justo que esta unificación, no cause costes añadidos a las diferentes economías de los miembros que la compongan, si no que cada uno internamente deba resolver ante el FME sus deudas pasadas.

Por supuesto y ya por último, esta nueva unificación deberá contemplar claramente que el incumplimiento cualquiera de las normas económicas aprobadas y unificadas, sería motivo de penalización e incluso la expulsión del incumplidor, por parte del consejo de gobierno de la comisión europea, tras acuerdo unánime de los miembros en comisión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario