Yo si estoy Indignado pero no porque me haya unido a la corriente campista de las plazas públicas de España, no es eso estoy indignado por la cobardía que muestra el gobierno del SR. Zapatero. Además de su impotencia en la gobernación del país añade ahora una cobardía impropia de un gobernante. Fíjense ustedes los jóvenes le montan en la Plaza del Sol de Madrid el centro de la centralidad, sede del gobierno, espejo de España, joya de la corona real, la capital del reino etc. Un folclore que da gusto verlo se van poco a poco pareciendo a los encantes viejos llenan las plazas de tenderetes, tolditos para parar el sol de la plaza del sol, invaden el paso normal de viandantes, coartan el libre comercio de los establecimientos por allí ubicados, hacen asambleas etc. Y el gobierno y el ministerio del interior se callan.
Pasan unos días y en Barcelona el conceller de interior intenta una operación para ver de remover las cosas y ver de desbloquear una situación espejo de la Plaza del Sol de Madrid, no sale bien la cosa, se hizo mal, yo lo recrimine, por ingenuo porque lo que hizo lo hizo solo y no le tocaba a él hacerlo, el tema de las plazas era y es, un tema de seguridad y orden publico nacional, a lo que vamos el ingenuo del conceller se lleva las bofetadas de todo el mundo, la prensa, de la sociedad siempre demagógica y benévola, y el gobierno central calladito, sin ni siquiera opinar si estuvo bien o estuvo mal, la acción liberadora de un espacio que debería ser público, y por tanto libre de panfletos, mesas, mesitas, cocinas, y cocinitas, y sobre todo libre de coacción indirecta, no a todos nos gusta pasar entre indignados.
Entre tanto en la centralidad de la capital todo el mundo quieto, calladitos no se nos vayan a enfadar, supongo diría el Sr. Zapatero, y todo el gobierno cuerpo a tierra, que no va con nosotros. Hoy saltan dos noticias ya para echarse a llorar, en otra capital periférica, o como dicen en el centro provinciana, se ha vuelto a liar una de bofetadas entre los indignados y la policía nacional, coincidiendo con la toma de posesión de la nueva Generalitat valenciana, otro ingenuo gobernador o conceller de interior que ha obrado yo diría con la lógica de la razón, pero que tampoco le tocaba arriesgarse porque ahora veremos cómo lo cuelgan del palo de la bandera, o no, quizás tenga más suerte al fin y al cabo ha sido la policía nacional. Entre tanto el gobierno central calladito y cuerpo a tierra.
Después de esta noticia ahora salen los que no han podido trabajar en sus negocios (eso sí libremente porque no han querido) dirán los indignados y demandan al ministerio del Interior de España una indemnización de 30 millones de Euros por lo bien que se lo han pasado y se lo están pasando todavía. Y el gobierno calladito y cuerpo a tierra ya está bien esto es cobardía pura es una demostración de miedo y terror al que dirán que es intolerable. Como me entere yo de que pagan ni un euro de mis impuestos a los afectados por su culpa les demando yo por cobardes por desidia, por abandono de la responsabilidad de gobernar y hacer cumplir la ley.
Y así esta todo en este país, no se atreven con los bancos, no se atreven con las cajas de ahorros, no se atreven con los sindicatos, no se atreven con los patronos, ya no se atreven ni con los manifestantes disfrazados de concentrados. Así no se puede gobernar están desautorizados totalmente, deben dimitir ya y avanzar para octubre que hay tiempo, elecciones generales y diré más, también acuso de cobardía al Sr Rajoy y su PP, porque no se atreven tampoco ha tomar las riendas, mucho gritar pero poco hacer, a esperar hasta que no tenga más remedio que enfrentarse con las urnas, y mientras tanto, cuerpo a tierra, que los tiros pasen por encima de sus cabezas. Dios que panorama nos espera.
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